Mi Destino

Se durmio

Después de que yo había firmado el contrato de la canción habían pasado 3 días en los que sólo miraba a Sebastián por la noche cuando regresaba a la habitación, pero él estaba muy cansado para hablar conmigo así que solo llegaba, se duchaba y se dormía ¿y yo? Yo me dediqué a conocer Los Ángeles, estaba en un lugar tan bonito, sin nada que hacer y con hospedaje por 3 meses pagando, no podía desaprovechar la oportunidad.
Sentía muy raro que no me dejaran de pagar el hospedaje, aunque creo que el que me lo paga es Sebastian, no importa quien me lo page, solo voy a estar aquí hasta que me digan cuando empezamos a grabar.
Sebastián no estuvo todos esos días conmigo por dos cosas, una porque no era nada suyo y dos porque tenía mucho trabaja, lo primero solo era una suposición pero lo segundo era una afirmación, de lo pregunté a él y dijo:
- tengo muchas entrevistas, sesiones y reuniones.
Así que era muy normal que regresara muy cansado.
Pero lo que me parecía muy extraño es que hoy no ha llegado y ya es media noche, no es que me pasara toda la noche en vela esperándolo, pero siempre me despertaba a la media noche a tomar agua y al baño. Ahora que lo pienso es muy raro que me de sed y ganas de hacer un orinar al mismo tiempo, pero que se le puede hacer así de rara soy siempre.
Me sentía un poco inquieta así que decidí seguir mi libro, siempre que leo libros me pierdo.
Revise la hora y ya son las 3:00 a.m., en 33 minutos es la hora de los fantasmas, mejor me duermo lo mas antes posible.
Soy muy supersticiosa, la mayoría de personas dicen que no es bueno ser supersticioso pero es que para ser sincera prefiero prevenir que lamentar.
Ya me estaba quedando dormida cuando me despertaron unos golpes fuertes en la puerta.
¿Qué hago? ¿Me levantó y abro la puerta? Y qué tal si es como en investigation Discovery y cuando abra la puerta va a estar ahí un parado un asesino en serie y me va a...
- Me... deje la llaa...vie.
Y soltó una risa boba.
Era Sebastián, era lógico que había tomado mucho, y no precisamente agua y jugó, sabes a lo que me refiero. Estaba arrastrando las palabras.
Sin mas me levante a abrirle, aunque si lo pienso bien realmente no era sano estar con un borracho en una habitación, no fuera a vomitar todo el piso, pero estoy en un hotel lujoso y puedo pedir servicio a la habitación cuando quiera.
Pero antes de abrir la puerta tengo que tener mi teléfono a la mano, no todos los días llegaba Sebastián Yatra a tu habitación tan borracho.
Agarre mi teléfono y camine hacia la puerta antes de abrirla puse la cámara en mi teléfono y comencé a grabar.
Abrí la puerta.
- pouurrrr... fffin, jaja - se dibujó una sonrisa boba en sus labios- que suuerte que... jaja no se lo que decí... aaaa si...
- vamos a acosta...
- shhhhhhh -dijo poniéndose un dedo en la boca y poniendo los labios en trompa- te va a escuuchar.
- ¿quien? No tiene sentido.
Lo empuje a la cama.
- ¡nooo! -soltó a gritos - no te aprovechees... de mi.
Le tape la boca, si alguien lo escucha puede venir y se va a encontrar con esta escena.
Por taparle la boca bote mi celular.
Sebastián aprovechó mi descuido para agarrarme las manos y acostarme en la cama, luego en una ágil vuelta se puso sobre mi. A pesar que estaba demasiado borracho tenía mas fuerza que yo. Me agite para intentar zafarme, pero me agarro mas fuerte y como ya he dicho antes era mucho más fuerte que yo no logré más que pegarme más a él. Él agarró mis muñecas y las puso sobre mi cabeza.
- soltame.
Solo me vio, pude distinguir un poco de picardía en sus ojos, pero no me soltó.
- dejame de ver y soltame.
- no quiero.
Comencé a agitarme más fuerte hasta que el perdió toda la fuerza y cayó fuerte encima de mi, sentí que se me paró el corazón, y me lastimó los senos.
- Sebastián levántate me duele y no puedo respirar.
Pero nada, ni se inmutó, lo peor es que me estaba estrujando.
- Sebastián - le pegue en el hombro varías veces. - levántate.
No hubo reacción de su parte.
- no puede ser, se durmió.
Comencé a empujarlo y a moverme hasta que logré zafarme.
Lo deje en la cama, le quite los zapatos y lo cubrí con una manta.
Antes de darme la vuelta sentí el agarre de Sebastián en mi mano.
- Gracias Yanet.
Sentí una puñalada al corazón o peor como si me pegaran con un tubo varías veces hasta que quede inconsciente.
No puede ser que yo haga esto por él y él le agradezca a esa Yanet, que seguro debe ser una pésima persona. Bueno quien lo culpa solo me conoce de hace una semana es lógico, que quería ¿que se enamorara perdidamente de mi en una semana? No, eso solo pasa en los libros mija, no se haga ilusiones, ademas aunque no lo acepte se que él está enamorado de Yanet.
Se me vino una idea poco convencional a la mente, qué tal si lo hacía, qué tal si hacía que el se enamorara de mi perdidamente, qué tal si hacía que olvidara por completo a Yanet.
Pfffff. Por favor eso es imposible, no se ni porque tengo ideas tan descabelladas aveces.
Mejor me duermo.
Después de unos minutos me dormí.

❤️❤️❤️❤️❤️❤️

Me desperté con el sonido de una cámara.
- buenos días bellos durmiente.
Al abrir los ojos noté que no era ninguna alucinación mía, si tenía una cámara en la cara, y me quien la dirigía era nada más y nada menos que Sebastián Yatra.
Me quede pasmada.
- ví que estabas durmiendo y pensé... una niña quedaría bien en la imagen de una de mis canciones.
- hasta cuándo vas a seguir con eso, ya te lo dije no soy una niña.
Entonces su mirada cambió a una más coqueta, aunque nunca desapareció la burlona.
- Demostramelo.
- ¿cómo?
- solo con preguntarme eso ya se nota lo niña que que sos, una mujer sabría exactamente demostrarlo.
Le saqué la lengua en uno de los gestos más infantiles.
- pero no te preocupes, a mi no me gustan las niñas, pero a una niña como tú no la rechazaría.
- El problema es que las niñas como yo no nos gustan los tipos que nos dicen niñas.
Me levante y le quite la cámara, se que no adopto posiciones vergonzosas o hago gestos raros cuando duermo, así que no me avergüenzo si me toman fotos dormida.
Comencé a revisar las fotos que me había tomado. Todas eran muy buenas.
Sebastián me quito la cámara y comenzó a buscar algo en la cámara, supongo que alguna foto en específico.
- mira esta.- se posicionó detrás de mí y pasó sus brazos por ambos costados de mi anatomía con la cámara en los brazos, recostó su barbilla en mi hombro. No en su cara se podía ver lo orgulloso que estaba por la roto.
En la foto estaba yo sumida en el más profundos de los sueños y la manga de espagueti de la camisa de mi pijama estaba abajo. Yo estaba de lado por lo que solo salía un hombre pero mi cabeza estaba viendo hacia arriba, por lo que mi cuello queda completamente al descubierto. La almohada de seda roja entonaba perfectamente con la foto. Era preciosa.
- sos hermosa.
Susurro a mi oído dejándome eriza la piel de esa zona, me gire como acto de reflejo, pero me di cuenta de lo cerca que estábamos. Subí mi mirada a sus ojos y el ya me observaba desde su altura.
Se acercó mucho a mi, sus labios se encontraban a milímetros de los míos.
Y justo cuando sus labios estaban por tocar los míos.
- Gracias Yanet.
Y me aleje, no se porque lo hice, yo me muero de las ganas de besarlo, pero me detuvo esa línea.
Perdí la oportunidad.
- ¿ qué pasó?
- seguís enamorado de Yanet.
- que manera de arruinar el momento.
Me mordí el labio.
El me tomo la barbilla y me dejo un pequeño beso en los labios, se dio la vuelta y se fue.

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Hola chicas, he aquí el primer beso.
Yo se que no es lo que esperaban pero con algo se comienza.
Espero que les guste.
Besos.