Ana
Estaba en mi cama acostada. Mirando el techo preocupada.
--Amor, calmmate. Todo estará bien. -Me beso la frente.
-- Me preocupa como esta Emma. Parece que se encariño demasiado con Olivia e Ian. - Dije triste.
-- Quizás lo hizo, pero nosotros estaremos allí para ayudarla a recuperarse de esta perdida como sus papás. - Me beso.
-- Gracias, ¿mañana podemos arreglar su habitación? -Él asintió- Te amo. -Sonreí.
-- Y yo a ti. -Nos abrazamos y nos fuimos a dormir.
Logre conciliar el sueño mientras estaba en sus brazos ya que para mí, era un lugar seguro.
Al otro día, cuando desperté. Me levante y fui al baño.
Luego baje a desayunar, subí y me vestí para luego ir al cuarto de Emma. Lo ordene un poco, cuando tocaron el timbre, lo abrí y era Emma. Ella corrió abraazarme y luego se alejó.
-- Tú no eres mi mamá. -Susurró- tu no eres mi mamá. -Repitió.
Ella empezó aumentar en cantidad y me comenzaba asustar.
Ya no era una Emma, eran como 25 o 40 que repetían lo mismo "Tu no eres mi mamá" una y otra vez mientras la miraban serias.
Me desperté empapada de sudor frío y mire a mi costado. Facu dormía como un bebe, luego mire la mesita de luz y el reloj marcaba 6:30am. Aun era temprano.
Me levante, agarre ropa y me metí al baño. Allí me bañe, sin lavarme el pelo ya que me volvería acostar, una vez que acabe me mire y suspire.
-- Ya Ana, no sueñes estupideces, ella misma te ha llamado mamá y si no lo cree así por ahora. Hay que darle tiempo. -Me dije a mi misma.
Salí del baño y me acosté con Facu. Pase mi brazo derecho por su cintura, vi como sonrió, bese su frente y él me abrazo pegandome más a su cuerpo.
Romi
Estaba mirando a Alex. Ayer en la noche hicimos un fogón para que Emma se alegre un poco y funcionó.
-- Ya dejame de mirar así, nunca me prestaste tanta atención. -Se rió él cuando acabo de hablar.
-- ¿Enserio te vas a quedar para estar en el hospital? Temo que Ty siga enfadado. -Dijo preocupada.
-- Él no me puede hacer nada, además, estará mi hermano contigo en España... Además de mi hermana. -Susurro lo último.
Cerré los ojos y mi mandíbula se tenso.
-- Dime que no dijiste que ira tu hermana. -él me sonrió- Alex ya sabemos como es tu hermana, es insoportable cuando estamos solas. -Se quejó.
Alex: Romina por favor, irá a terminar sus estudios a España. -Me hizo una carita de cachorro.
Romi: Bien... -Mi celular sonó y era el abogado de los padres de Olivia- que raro.
Respondí y resulta que los papás de Olivia tuvieron un accidente y Vanessa su pequeña hija de 3 años había quedado un familia. Claramente le explique lo sucedido con Olivia. Pero él me dijo que yo podría haceme cargo de ella, ya que los padres de Vanessa y Olivia así lo pidió. Accedí ya que de lo contrario la pequeña iría a un horfanato.
-- Tía Romi, ¿a que hora nos vamos? -Bajo Emma corriendo, ya vestida.
-- Para que son las 7:30 de la mañana, mirame, ni siquiera me he vestido. -Me reí.
-- Estoy un poco ansiosa.
-- Nos dimos cuenta pequeña. -Él se rió mientras la agarraba aúpa.
-- Hey ya estoy listó. -Bajo las valijas- ¿Que haces aun en pijama?
-- Hay que estar a las 10:30 y son las 8:30. -Los mire ambos.
-- ¿Te gusta la ropa de Emma? - Dijo Manu intentando cambiar el tema.
-- Si, ¿te gusta mí vestido? -Me sonrió.
Yo me reí y abrace a la pequeña.
-- Me encanta, Emma. -Le respondí.
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Amigas desde la adolecencia
AbenteuerEsta historia habla de un grupo de chicas (cinco para ser exactos) de 18 años. Ya eran independientes, la mayor vivía en New York por su trabajo y compartía el apartamento con una amiga que conoció allí. Las otras cuatro vivían en Montevideo, Urugua...