Ari
Llegué a mi habitación y Iban estaba leyendo, me reí un poco por sus lentes, lo usaba muy abajo.
- ¿Te burlas de mi? -Negue.
-Solo es chistoso que uses tan bajo los lentes. -Le dije y me metí a la cama.
-¿Gracioso? Para mi es más cómodo. -Dijo él mirandome, cuando me acoste.
Dejo su libro, se sacó los lentes, yo también me saque mis lentes y él beso mis labios.
- Te amo. - Me susurró sobre los labios.
- Yo te amo más. -Le susurre y junte nuestros labios.
- No, yo más. -Dijo él.
- No, yo. -Le dije.
- Yo. -Siguio él.
-Claro que No, yo. -Ataque.
- Yo. -Contra atacó.
-Yo. -Segui.
-Bien, ambos nos amamos mucho. -Ambos reímos y nos dormimos abrazados.
Al otro día nos despertamos y dio la casualidad que era el libre de ambos.
-Mami, ¡hoy será mi primer día! -Dijo saltando a mis brazos.
- Lo se amor, te iremos a ver. -Le hice cosquillas.
-Papi, ¿Eso quiere decir que los dos irán?
-Claro pequeño. - Lo sentó en su silla y le dimos su comida.
Nosotros nos sentamos y comenzamos a desayunar.
-Esta muy rico amor. -Le dije a Iban.
- Lo se, me costó mucho pedirlo. -Ambos reimos.
Meli
Me levanté y Manu ya no estaba. Fui hacía la habitación donde dormían mis pequeñas y estas tampoco estaban.
Baje y vi a casi todos comiendo, menos a Cheryl.
-Holis personis. -Dije feliz y bese los labios de mi novio.
- ¿Enserio saludas así? -Se rió Malina.
-Ya te acostumbraras. -Se rió Romi.
- ¿De mi? Me mudo mañana, el tema es que se acostumbre de ti. - Me reí y ella dejo de hacerlo.
-Eres cruel conmigo. -Hizo puchero.
-Muy cruel. -La corregí y me reí.
-Pobre mi amiga. -La abrazo la joven chica y ella me echo la lengua siguiendo el abrazo.
-Levanten esas manos y se separan un metro. -Miramos donde salía la voz y era una Cheryl casi que dormida caminando hacia nosotros.
- Creo que es un zombie. -Dijo Alex.
-Si este es mi último día... ¡YO COMI UN CHOCOLATE TUYO AMOR! - Me dijo Manu y yo lo golpee.
- ¿Como te atreviste a dicho insulto? Sabes cuanto amo a mis chocolates y te comiste uno. -Dije enojada.
-Te amo, pero me tentada demasiado esa caja ¡ADEMÁS TIENES MÁS DE CINCUENTA! No te ibas a dar cuenta.
-Claro que lo haria. No vi a jueves 11 de abril. -Él me miro confundido.
Yami
Este punto de vista es en la noche.
Luego de que Pablo me haya dicho aquello con ese tono de voz y su disfraz de Navidad me reí.
ESTÁS LEYENDO
Amigas desde la adolecencia
PrzygodoweEsta historia habla de un grupo de chicas (cinco para ser exactos) de 18 años. Ya eran independientes, la mayor vivía en New York por su trabajo y compartía el apartamento con una amiga que conoció allí. Las otras cuatro vivían en Montevideo, Urugua...