Capitulo 32

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Narrador

Todas las chicas se encontraban en el trabajo menos Meli que había sido informada por la situación que estaba su amiga en este momento, así que creyó que sería mejor que cuando todas estuvieran libres se juntaran.

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Idiota

Chicas, ¿hoy deben hacer algo luego de su trabajo?

Idiota perv.
Yo no.

Idiota bomba
Yo no.

Lentes locos
Nop ¿Porque?

Idiota
Parece que el padre biológico de Romi vive, ella ya sabía de eso, No reaccionó con sorpresa, pero no se como es su relación. Ahora está con su novia y no quiere ver a nadie. Pensé en salir para no preocuparme, Pero si salgo sola no lo lograre.

Idiota perv.
¿Que les parece si nos vemos a las 18?

Lentes locos
Por mi está bien.

Idiota bomba
Yo llegaría como a las 18:30.

Idiota
Esta bien, Ana, Yami vienen a la 18 y Ari venís media hora más tarde. Será en el centro comercial cerca de aquel hermoso parque, las espero idiotas.

Mientras tanto Ari ya estaba en la veterinaria, había dejado a Vicente en su jardín y ella estaba bañando a un gato.

-Estas enojada. Se nota. -Aparecio uno de los nuevos empleados.

- Si lo estoy, pero eso no te incumbe.

-Tenes razón, pero tampoco es culpa del gato. -Mire al animal y estaba temblando por el frío que estaba agarrando.

Lo seque con un secador para que deje de temblar y así lo hizo, bajo de la mesa de un salto y se fue con los otros dos empleados.

-¿Quieres hablar o lo seguirás emitiendo?

- Esta bien, tengo un amigo, él estaba junto a un niño que ambos debíamos cuidar, entonces el niño quería ir al zoológico y yo me negué, los animales no deben estar en jaulas, pero él no pensaba igual, así que se enojó y se llevó al niño, yo no iba a tocar aquel sitio donde admiran la tristeza de los animales y le sacan fotos o le tiran alimentos malignos. Así que fui a mi casa enojada, desde entonces no hemos vuelto a hablar.

-Comprendo, quizás debas hacerlo, demostrarle que tenes una opinión sólida y esperas a que la respete. Que no es necesario esos ataques de irá. -Asenti.

-Gracias, Me sirvió mucho contárselo a alguien.

-Suele suceder. -Se rió.

Mientras tanto Yamila estaba en su trabajo, el simple hecho de tener un paciente nuevo la ponía nerviosa y más el saber que tenía trastorno de personalidad multipe. Era su primer caso y temia no poderlo abordar bien.

Amigas desde la adolecenciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora