Marinette, ¿una bruja?

Especial de navidad

Marinette estaba hablando con Alya mientras iban a la casa de la azabache, sin saber el peligro que acechaba.

Nino que estaba temblando de tanto frío, miró a su sonriente amigo.

-N-no creó que sea buena idea hermano, sé muy bien por Alya que Marinette no es muy fanática de las guerras de nieve. Hasta podría en...

-¡Piensa rápido, gran bruja azabache!

Adrien lanzó con todas sus fuerzas una bola de nieve mientras Marinette volteaba por como fue llamada, recibiendo el impacto en medio del rostro y cayendo al suelo con los brazos y piernas extendidas mientras Nino miraba estupefactado.

-¿Por qué me sigo esforzando con éste tipo?

Marinette se sentó mientras veía en dirección de Nino lamentándose por sus amistades y Adrien riendo mientras la señalaba con el dedo, como niño pequeño.

-Esperó órdenes mi capitán. - exclamó Alya mientras la azabache se paraba y sonreía.

-Está noche Adrien y Nino no comerán pavo por que se llenarán comiendo nieve.

Las dos chicas se pusieron a hacer bolas de nieves y se pusieron a jugar con los chicos.

Era la primera vez para los cuatro amigos, jugando en la nieve.
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Ésa noche.

Marinette estaba entrando a su habitación, ya duchada y con su retaguardia dolida ya que su madre le pegó por jugar en el frío.

Y ella que le prometió no volver a pegarle, mentirosa y su padre traidor por que le pidió ayuda y fingió salir a comprar pan, viviendo ellos en una panadería.

La azabache paso a su habitación y se sorprendió al ver a su novio sentado en su cama y las galletas que ella había dejado en una mesa por si él llegaba antes de que se terminé de bañar, estaban intactas.

La chica subió las escaleras hacía su cama y miró al felino, preocupada.

-¿Sucede algo, Chat? - preguntó mientras el negaba con la cabeza y extendía sus brazos.

-Curame, por favor.

Dijo el triste chico y su novia lo miró con preocupación.

Se había acostumbrado tanto de ver a Chat noir como un tonto a su lado que se olvidó que él también debía pasar por problemas.

La chica se acercó y los abrazo, haciendo que Chat noir corresponda y frote su mejilla en el pecho de ella, oyendo el palpitar del corazón de su novia.

No todos los hechizos de Marinette eran malos, ahora estaba haciendo uno bueno pero Chat noir sabía que Marinette era una bruja poderosa y  mientras hacía un conjuro para que se calme, también hacía uno para que se enamoré de ella.

Marinette, era una bruja muy peligrosa y la iba a detener en su debido momento.

-No sé que sucede y sé que Ladybug te tiene prohibido hablar de tu vida de civil, inclusive a mí... pero sí te parece bien... ¿pasarías noche buena conmigo y mi familia?

El rubio se sorprendió al oír éso y rompió el abrazo para ver la dulce sonrisa de su novia.

Ésa noche, Adrien tendría que pasar navidad sólo ya que su padre se fue a una importante reunión de negocios y Nathalie lo acompañó.

Tenía el permiso por única vez de pedirle permiso a Nino para pasar con él pero no lo hizo.

No quería ser un mal tercio.