Capítulo 6: Volviendo a la rutina

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El primer día de clases, oficialmente, de segundo año, comenzó soleado y estaba bastante feliz. Levantarme en la sala común de Gryffindor era realmente genial, si que extrañaba este lugar. En fin, me encontré con Neville en camino al Gran Salón y entramos juntos. Harry y Ron estaban sentados frente a Hermione, quién tenía un libro llamado Viajes con los vampiros. Los saludé con una sonrisa, pero nadie me devolvió el gesto. Aparentemente, Harry y Ron se encontraban muy enojados y de mal humor por lo que había pasado con el auto y, Hermione no se gastó en reprocharles. En verdad, sí, lo que más duele es la ignorancia.

- Bueno, este año no voy a meterme en problemas - dije seria, pero no duré mucho ya que me largué a reír. - A quién engaño, seguro me mando alguna y termino con Filch.

Harry solo levantó la mirada y me regaló una media sonrisa. Hermione no se dejaba ver la cara mientras que Ron se golpeaba con su mano en la frente.

- Ron, tienes que comer algo... Tú eres como yo, ¡nos encanta la comida!

- Mack, creo que no vas a poder comer por mucho...

- ¿Qué...?

Pero antes de que pueda terminar la oración, la lechuza de Ron, Errol, aterrizó en la mesa y llenó toda la comida con sus plumas.

- ¡No, la comida! - exclamé. - Digo... ¡Errol!

- Qué ave más tonta - dijo Ron, pero al ver el sobre rojo que llevaba Errol en su pico, su rostro cambió. - Oh no...

- Ron, diría que la abras - dijo Neville. - Una vez, la abuela me envió una, y no la abrí... - cuenta. - Fue horrible.

Ese sobre rojo era una carta vociferadora. Era realmente malo cuando recibías una porque podía pasar lo que sea. Hermione abrió los ojos con sorpresa y Harry no estaba entendiendo nada.

Ron la abrió y yo lo tomé del hombro para no caerse hacia atrás. El sobre se convirtió en una especie de boca que cuando comenzó a gritar, captó toda la atención del Gran Salón.

- ... ROBAR EL COCHE... NO ME HUBIERA EXTRAÑADO SI TE EXPULSABAN... CUANDO NO VIMOS EL COCHE, TU PADRE Y YO... CUANDO TE ATRAPE VERÁS...

Los gritos de la señora Weasley retumban en todo el desayuno, hasta los cubiertos y platos se movían de un lado para el otro. Suspiré, pero no podría estar peor que Ron. Nunca lo ví tan asustado.

- ... LA CARTA DE DUMBLEDORE QUE NOS LLEGÓ ANOCHE... NOS MORÍAMOS DE VERGÜENZA... ¿POR QUÉ NO ERES COMO TUS HERMANOS?... NO TE HEMOS CRIADO PARA COMPORTARTE ASÍ... HARRY Y TÚ PODRÍAN HABER MUERTO.

Harry me miró, preguntándose cuando iba a decir su nombre. En verdad, la señora Weasley tenía una voz muy fuerte que hacía que mis oídos temblaran.

- ... SI VUELVES A COMPORTARTE ASÍ...

El sobre le escupió a Ron y se partió pedazo por pedazo hasta quedarse callado. Todos los alumnos de Hogwarts miraban a nuestra mesa, a Ron. Yo, por mi parte, me quedé un tanto atónita. Cuando por fin Hermione dejó ver su cara detrás de ese libro, dijo:

- Bueno, Ron, eso fue poco... No sé lo que te esperabas, pero tú...

- No me digas que me lo merezco - le espetó Ron.

Al salir del desayuno, nos dirigimos a nuestra primer clase: Herbología. Con los de Hufflepuff. Al frente del invernadero, se encontraban la profesora Sprout y Gilderoy Lockart. Ron revoleó los ojos y Hermione fue corriendo hacia él con una sonrisa.

- ¡Hola, qué tal! - saludó él. - No es que sé más de Herbología que Pomona, nada más le estaba dando consejos de cómo curar el sauce boxeador. Verán, yo viajé a...

Mackenzie y la cámara secreta | [MEH #2]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora