Mackenzie y la cámara secreta | [MEH #2]

Capítulo 20: Confesiones y catástrofes

Era el primer día después de las vacaciones de invierno y Hermione seguía en la enfermería. La fuimos a visitar todos los días para preguntarle cómo estaba y para informarla sobre las clases. Ella estaba mejor; además de que había recibido una nota de recuperación de su amor imposible, Gilderoy Lockhart, así que sonreía. Cuando los demás alumnos regresaron a clase, creyeron que mi mejor amiga había sido atacada, pero me encargué de que aquellos rumores desaparecieran rápidamente.

Harry, Ron y yo, el martes, estábamos saliendo de la clase de Pociones cuando vi a Maddie acercarse a mí por el pasillo. No supe cómo interpretar su expresión, pero podía decir que se veía entre preocupada y emocionada.

- Hola, Mack - me saludó y también les sonrió a los chicos. - ¿Podemos hablar?

- Claro - respondí sin problema. Me dirigí a mis amigos para decirles: - Los veo en la cena.

Ellos asintieron y Maddie y yo comenzamos a caminar hacia el patio principal.

- Entonces... - hablé yo. - ¿Has pasado unas buenas Navidades?

- Sí, he estado con Remus, ya sabes, y pudimos hablar y él me ha explicado bastantes cosas.

Nos sentamos en el césped, cubierto por un poco de nieve, y nos miramos la una a la otra.

Maddie me contó todo lo que sabía: que su tutor y mi madre han sido amigos muy cercanos cuando asistían a Hogwarts, y que mi padre ha sido el mejor amigo de Remus. Mamá y papá se habían separado la noche en la que los padres de Harry Potter fueron asesinados por Voldemort. Papá había intentado ayudarlos, y mamá estaba conmigo y con "mi hermana" (en palabras de Maddie).

- Maddie... - la interrumpí y a ella se le tornaron las mejillas a rojo. Tragué saliva y pregunté: - ¿Somos hermanas?

- Somos hermanas - sonrió.

Me quedé paralizada por un momento, pero luego sentí podía volver a respirar de nuevo. Con lágrimas en los ojos, me abalancé a Maddie y la abracé. Ella me sostuvo en sus brazos, rodéandome también y me acarició el cabello. La escuchaba sollozar como yo, pero ninguna se separó por un par de minutos. Fue como si necesitáramos el contacto de la otra y sentí que estaba en casa.

- ¿Cómo...? - quise cuestionar yo, pero tuve que secarme las lágrimas y mantener la calma antes. - ¿Cómo es que mamá pudo hacernos esto?

- Remus me ha dicho que Voldemort estaba buscando a Yasmine ya que ella tenía habilidades, habilidades con los cuatro elementos de la naturaleza. Y que era posible que su descendencia tenga esos poderes también.

- ¿Qué...? - me levanté de su pecho y las dos nos observamos con los ojos rojos. - ¿Que mamá qué?

- ¿Por qué parece como si supieras de lo que estoy hablando?

Cerré los ojos, maldiciendo por dentro. Suspiré y los abrí otra vez. 

- Maddie, he comenzado a desarrollar esas habilidades el curso pasado - le confesé.

Ella frunció el ceño y su boca se abrió para decir algo, pero nada salió. Se quedó mirando un punto fijo del suelo, asimilando la información.

- El fuego fue el primero... - seguí contándole. - Fue... aterrador cuando me sucedió. Pero Snape me estuvo ayudando en unas clases particulares y creo que ahora estoy por desarrollar otro poder ya que me pican mucho las manos...