-¿Ves esto de aqui? Es el latido...
No me podía estar pasando esto a mi... ahora no...
Estaba embarazada. De 6 semanas
-Enhorabuena... ¿eres el padre? - le pregunta a Marco cuando lo dejan pasar
-No... -corto yo rápidamente
-¿El padre de quién? - me pregunta Marco súper extrañado
-Marco... estoy embarazada...
Primero me mira súper parado. Pasa a la fase de ilusión y a la de alegría, pero, al ver mi negativa con la cabeza, lo acepta.
No es el padre.
Se le humedecen los ojos,pero se queda en silencio, y, mientras que la doctora me da mil y un consejos para madres primerizas,me coge la mano y me la aprieta con fuerza
Si todos tuviéramos un Marco en nuestra vida, habría mucho menos hijo de puta. Eso seguro
Salimos y yo estoy temblando. Me abraza con fuerza y me anima
-Venga enana. Enhorabuena ante todo, mamá -y me empuja en broma
Al ver mi cara adivina lo que estoy pensando
-Tienes que contárselo - me ordena
Le llamo por teléfono.
-Hola amor... - se le escapa. Yo sonrío por el lapsus, me ha gustado
-Hola... necesito verte... necesito hablar contigo
-¿Ha pasado algo?
-Si... y necesito hablarlo en persona. ¿Puedes quedar?
-Claro mi vi... claro Laura. ¿Dónde?
-¿En mi casa?
-Ven tú hasta aquí si quieres cuando salgas de trabajar
-No tengo que ir a trabajar... hoy al menos no
-¿Tú faltando al trabajo? Si que pasa algo... ven ya si quieres
Claro que voy ya. En el Uber voy acojonada pensando en su reacción.
Claro que quería niños, pero ni siquiera estábamos juntos... y ojalá que estuviese solo en casa.
Si yo tuviese que enfrentarme a una situación como la de aquella mañana en casa de Marco, me querría morir.
Llego y él ya estaba a la puerta, esperando
-Hola -me saluda al entrar
-Hola - le saludo yo de vuelta
Al hacerse a un lado para que entrase, le beso la mejilla, por impulso. Y él sonríe ante el gesto
Me siento en el sofá y le miro fijamente
-Tenemos que hablar
-Tú dirás
Jugueteo con mis manos y, más tarde con el cojín que tenía al lado.
Mariano espera pacientemente, me conoce de sobra, y sabe que estoy hiperventilando
Se sienta en el sofá y me coge las manos, gesto que hace que me estremezca
-Laura... cariño... dímelo. Sea lo que sea
Y, a bocajarro, lo solté
-Estoy embarazada
Él suelta mis manos, pasándoselas por el pelo. Anonadado
-¿Estás...?
-Si... y antes de que preguntes nada es un si. Es tuyo
-Laura...
Sigue sin dar crédito mirando alrededor como un autómata
Yo me esperaba una reacción más efusiva, más de alegría. Pero él sigue alucinando
-Mira,Mariano... se que no estamos juntos, pero yo quiero tenerlo. Me encantaría que quisieras formar parte de su vida, pero eso ya lo eliges tú. Ojalá te alegrases tanto como yo...
-¿Crees que no me alegro? - y de repente parece que reacciona - No me alegro, es que ahora mismo tengo tanto cacao mental que no soy yo. Pero claro que me alegro. Ya eres oficialmente la madre de mi hijo. Es más de lo que podría pedir nunca -me dice y me coge en volandas por el salón
-Bájame que me tiras -río
-Es verdad... ahora podría hacerOS daño - y recalca mucho el plural
Mira mi vientre con ternura
-¿Puedo? -musita
-Claro, eres su padre
Se arrodilla delante de mi y levanta un poco mi camiseta, acariciándome la piel, y dando pequeños besos
-Hola pequeño
- O pequeña - le contesto yo
-Hola bichito - y me mira triunfante -Soy papá. No te conozco y ya te quiero. Eres el mejor regalo del mundo. Tú y mamá. Sois lo mejor que tengo
No puedo aguantar más las lágrimas y le abrazo
Él llora, con la cara en mi tripa abrazándome las piernas también
Vamos a ser papás. El equipo aumenta.
Aunque los dos tengamos un miedo que sólo nosotros entendemos
-No voy a dejar que pase lo de la otra vez... nunca más -me dice Mariano mirándome a la cara
