Good girls and bad girls - 5sos

Capítulo 28

Calum's pov

De acuerdo, lo admitía. Estaba demasiado feliz o sorprendido por lo de ayer. Recuerdo cuando mamá me dijo que el amor se encontraba en la persona que menos se esperaba. Y esa mujer no se había equivocado. Es solo que yo no me había dado cuenta de lo que pasaba a mi alrededor. Hasta que los celos me quitaron la venda de los ojos. Recuerdo aquel día como si hubiera sido hace tanto. Pero la verdad que no era nada. Solo tenía catorce años cuando comence a ver a Trice de una manera diferente. Aquel inicio de clases cuando la vi. Yo mismo me sorprendí babeando las calles por ella. Incluso sentí como mis puños se cerraban cada vez que Dylan insinuaba que quería invitarla a salir. Y como Dylan hubieron muchos, pero no era su culpa. Aquel verano le había sentado de maravilla. Su piel era más dorada y su cuerpo acababa de entender que estaba creciendo. Y las curvas que parecía que jamás iba a tener, ahora estaban ahi. Repitó. Los celos me habían demostrado que me había enamorado de mi mejor amiga. Y lo peor de todo, fue pensar que ella no sentía lo mismo. Hasta aquel día, en el cual me sentía tan incomodo de estar en sombrerete con Lauren. Y no con Trice. Ordenar aquellos tacos y ver comer con delicadeza y educación a Lauren y no ver como Trice comía incluso peor que un mono. Extrañar nuestras competencias de ver quien comía más rápido. Y lo peor de todo fue cuando la bese. Pero había sido para dejar de pensar en Trice. Aunque solo empeoro la situación. No es normal imaginar que esos labios serían los de ella. Que yo no estaba besando a Lauren sino a Beatrice Fletcher Cure. Mi mejor amiga. La chica de la cual me enamore cuando tenía trece. Incluso antes pero no sabía lo que era el amor. En conclusión todo se retornaba al día de ayer. Aquel beso que había estado esperando por fin se había dado. Y todo por su decisión de dar el primer paso. La sonrisa en mi rostro aun estaba. Lo peor de este día. Era que no la había visto. Habiamos sido sorprendidos por su madre quien me dijo que debería volver a casa. Claro, después de haber tomado una taza de café y decirle lo que había pasado. Sin más conduje a casa recordando aquel beso y pensando en las palabras de mi nueva "suegra". Que no era tan nueva. Pues para Annabeth yo siempre había sido su yerno favorito. Aun antes de serlo y de ser él único. Y bueno aun no lo era pero eso cambiaría. El sonido del silbato del profesor me había regresado a la realidad. A una no tan linda. Todos los jugadores corriamos alrededor de la pista. Ashton iba a adelante discutiendo con William sobre no se que cosa. Iba feliz. Cosa que me hacía recordar a Charlie y a Luke. ¿Qué habrá pasado con ellos? Elevo mi vista hasta las gradas donde Luke parece entretenido con seguirme con la mirada. Le saludo y el hace una seña con su rostro. 

-Hood- escuchó que me llaman. Giró mi vista hasta donde se encuentra la voz. Michael Clifford número diecinueve y defensa central me esta mirando. 

-Hey- saludo con una sonrisa. 

-¿Se puede saber por qué tan feliz?- pregunta. Niego con la cabeza regresando mi vista al frente y corriendo a la misma velocidad que Michael. 

-Nada en especifico- Claro. Nada que fuera tan concreto como una castaña de tez morena, de uno metro con setenta y tres centimetros. -¿Por qué lo preguntas?- 

-Bueno, es raro ver a un jugador tan feliz corriendo quitando el hecho de que cualquiera preferiría lanzar el balón hasta la red- dice sin más. Rió levemente. -Supongo que Trice no tiene nada que ver- dice. Lo miró frunciendo el ceño. -¿Así que si es ella? - el sonrojo inunda mis mejillas- Tranquilo Hood, me alegra que tomes la iniciativa. Creí que ese tal Nathan sería más valiente que tu- el beso que ellos se dieron intencionalmente vaga sobre mi mente y me quita la felicidad que tengo. El entrenador nos dice que paremos y vayamos a vestidores. Michael respira pesadamente y me mira. -Aunque a ella le agradas más de lo que piensas- me guiña el ojo para lanzarce sobre la espalda de Ashton. 

Camino con lentitud hasta vestidores. -Hey- escuchó una voz y me giró para ver quien es. Luke corre hasta mi. Camino a su lado meintras el intenta igualar mi paso. 

-¿Qué pasa?- preguntó. Limpió el rastro de sudor que invade mi rostro y cuerpo. Necesito una ducha. 

-¿Has visto a Trice?- pregunta. Detengo el paso que mis pies marcan y lo miró. 

-¿Por qué?- pregunto con algo de celos. 

-Bueno, me ha dicho que ella no se ha presentado el día de hoy y no la he visto en ninguna de las tres clases que compartimos. ¿Sabes donde puede estar?- pregunta. Trice jamas falta a clases. Frunzo el ceño negando con la cabeza al mismo tiempo.

-Le preguntaré a Charlie- dice caminando. Lo miró alejarse cuando me doy cuenta. Corró hasta él.

-Vamos a preguntarle- divago.

++++

-¿Entonces Charlie no vino?-pregunta Luke hacie el castaño frente a nosotros. Lo miró con algo de resentimiento.

-No. Ni siquiera la vi cuando salia de casa.- dice con una sonrisa. Estúpido Nathan. 

Luke me mira. -Supongo que han de estar juntas- se encoge de hombros Luke. 

-¿Trice también falto?- pregunta Nathan con la frente arrugada. Luke asiente,.

-Nada que te importe- suelto tomando a Luke del brazo y caminando lejos de su presencia.

-Créeme que me importa- Lo escuchó. Luke se detiene y me mira. Aprieto los puños con fuerza. -Como escuchaste. No sé que tienen ustedes, pero no voy a darme por vencido. Ella me gusta, deberías darte prisa si no quieres que gané este juego y me lleve a la hermosa castaña- me guiña el ojo. Camino lejos del comedor donde recibimos algunas miradas.

Luke llama a mi espalda pero no lo escuchó. Un vez fuera del edificio. Gritó con todas mi fuerzas  y estrelló el puño contra la pared.

-AHHHHH- gimo de dolor al ver mi puño sangrar. Luke niega con la cabeza. -Pateo los botes de basura. Luke me toma por los hombros. Lo alejó de mi y sigo golpeando lo que encuentro. Luke golpea mi mejilla con fuerza y lo miró. 

-Te llevaré al doctor- dice Luke una vez que sonríe al verme en ese estado. Maldito rubio.