M I E D O || Bill Denbrough (TERMINADA)

Chapter Four

[...]
En otro lugar fuera de Derry, Mike iba en su bicicleta hacia el pueblo, pasando x otros campos, cruzando calles y más calles, hasta al fin llegar a lo q era el centro del pueblo, bajando x una calle empinada, tuvo cuidado de q ningún coche se lo llevase x delante. Al llegar a una vereda donde había un pequeño callejón, puso un pie en el suelo, bajando. Apoyando su bicicleta en el poste más cercano, el moreno estaba sacando del canasto lo q debía entregar. Sin embargo, al mirar al frente agudizando la vista, la sangre se le heló, como si hubiese visto su peor pesadilla.

Entra. – Logró oír q Henry le decía a una muchacha q pasaba x ahí. Rápidamente.

Con su bicicleta en mano, corrió hacia el callejón como alma q huye del diablo, se escondió detrás de un montón de bolsas de basura, colocando su bicicleta delante de él como si ella lo fuese a defender ante cualquier problema. Al mismo tiempo q eso pasaba, el auto de la Bower Band pasaba de largo. Mike se permitió respirar con tranquilidad y ponerse de pie, donde anteriormente se había agachado en cuclillas.

-Cielos. - Tenía miedo de ir x en frente, asiq decidió dar lo q debía x la puerta de atrás, respirando dificultada mente, maldiciéndolos en el interior. Comenzó a caminar hacia un basurero, quedando en frente de la puerta de madera. En la pared al lado de ella, estaba todo de color negro, como si allí, hubiese habido un incendio.

Mike comenzó a sacar x 2da vez lo q debía entregar del canasto. Pero unos susurros lo distrajeron, venían de detrás de la puerta, junto con el sonido de la cadena q mantenía cerrada aquella puerta, el chico se giró x completo, mirando detenidamente. Pegó un salto en cuanto algo golpeo la puerta, intentando abrirla.

Lentamente, empezaron a salir unas manos de allí, negras, quemadas. El, asustado se quedó congelado, al poco tiempo, de la puerta comenzó a salir humo, como si algo se estuviese quemando, de repente se escucharon gritos desde adentro, implorando su ayuda, mientras la puerta aún era golpeada.

-¡Mike!-

-¡Apúrate hijo! – Ahí lo entendió eran las voces de sus padres

-¡Ayuda! ¡Me quemo! –

-¡Mike!- Se acercó, con las manos sudadas, queriendo ayudar. Pero al momento de hacerlo. Las manos volvieron adentro, como si algo hubiese tirado de ellas, los gritos desaparecieron, la puerta se cerró, lo q ocasionó q el humo, dejase de salir. Retrocedió un paso, y la puerta se abrió x completo.

No había fuego, ni personas quemadas. Todo lo contrario, era una habitación, tapada x una cortina de plástico. Alrededor había ovejas colgadas, mientras q en el medio, se veía un payaso, haciendo ruido mientras al mismo tiempo, devoraba una pequeña oveja q dejo de gritar.

El payaso, lo miró, dejó al animal y se enderezó frente a la cortina, el chico retrocedía con el corazón en la garganta. El monstruo, levantó su mano y lo saludo a modo princesa, en lo q sus ojos irradiaban una luz amarillenta, sedienta de hambre.

Mike oyó el ruido de un motor, x lo q se obligó a apartar la mirada, era el auto de hace un rato atrás, rápidamente se echó para atrás, cayendo sobre las bolsas de basura deteniendo su caída, el coche paró enfrente de él, y el "líder" saco su cuerpo x la ventana y le gritó con repulsión.

-¡Vete de mi pueblo!- Le lanzo una pequeña bola de papel, mientras su amigo, el q conducía le sacaba el dedo del medio, en plan, "Fuck You". Henry volvió a sentarse y el auto arranco velozmente.

Pero al de piel de color no le importo en el momento q vio q alguien salió x la puerta, con sudor en su frente rápido posó su vista en la figura, se relajó al ver a su tio salir a la luz y no al payaso.

-¿Mike? –Se acercó- ¿Estás bien, hijo? – No supo q responder aún seguía en shook.

[...]

(A ver quien reconoce esta escena)

-¡Harper! – Oyó a su madre, sin embargo, se hizo la tonta y siguió mirando x su ventana, pensando, sus amigos de la escuela se iban todos de vacaciones asiq probablemente pasaba el resto del verano con sus nuevos amigos, los perdedores. Una vez más escuchó a su madre, pero esta vez en la puerta. – Harper, tengo q salir, x favor. Si llegas a salir cierra con llave, y saca las sabanas del tendedero, se está levantando viento.

- Ya te oí. –Dijo suspirando, no tenía ni las más mínimas ganas de levantarse de su lugar junto a la ventana. A continuación, los pasos de su madre se alejaban cada vez más. También escucho como hablaba con la perra, rodando los ojos divertida. La puerta de entrada se cerró, dando entender q su progenitora se había ido.

Se volvió a sumir en sus pensamientos, extrañaba a Jack, un "amigo".

Escucho el ladrido de Nana, haciéndola entender q quiere salir. Al parecer nadie quería q pensara hoy. Se desperezó y se levantó dirigiéndose a la puerta, en cuanto la abrió Nana empezó a dar vueltas feliz. Harper sonrió negó con la cabeza divertida.

-Vamos – Se dirigió escaleras abajo, tomó un canasto de x ahí y salió. Nana contenta, recostándose en el pasto, corriendo y jugando. Ella suspiro, envidiaba la libertad q tenía su amiga. Caminó hacia las sábanas blancas, nunca entendió de donde sacaba su madre tantas, si solo eran 2 camas q usábamos. Bueno, y a veces la de la habitación de huéspedes.

Estaba dispuesta a empezar a descolgarlas. Hasta q Nana chocó su pierna queriendo q la persiga, ella hubiese jurado q estaba en la parte de adelante, sonrió quitándole importancia. La siguió entres las sabanas riendo ya q se pasaba x sus piernas, le daba vueltas, saltaba, etc. En un momento la perdió de vista, frunció el ceño, fue como si hubiese desaparecido, fue pasando entre las sabanas, buscándola, estaba tranquila hasta q escucho una rama romperse detrás de ella, se giró bruscamente. Se quedó pasmada al encontrar una sombra detrás de una sábana, no era Nana, no era su madre, ni siquiera parecía alguno de sus amigos queriéndola asustar.

Parecía alguien disfrazado de payaso, una persona muy alta. Sin embargo... ¿Q hacia esa persona ahí?

Desconfiada se acercó a la sabana, levantando su mano lentamente, tenía un mal presentimiento, la tomó, debatiendo mentalmente si fijarse o salir corriendo, respiró hondo, decidida, se armó de valor y bruscamente corrió la tela, pero allí no había nada. Confundida la soltó, pero aquella sombra, ya no estaba allí. Volvió a agarrarla y pasó debajo de ella, y se quedó mirándola unos segundos, la soltó, pero apenas soltarla, la tela se levantó dejando ver del otro lado aquel payaso q vio apenas llegó al pueblo. Este le sonrió, dejando ver sus dientes filosos.

-Holi. – Harper se echó a correr gritando, sentía como el payaso estaba detrás de ella, se reía... Siguió corriendo, las sabanas se le hacían eternas, se tropezó con el canasto q había llevado para poner las sabanas, se giró rápidamente quedando sentada en el pasto, ya había pasado todas las telas blancas, miró hacia todos lados, pero aquella cosa, ya no estaba allí.

Se levantó, y se alejó de allí lo más rápido posible, entró a su casa, tomo las llaves, cerró. Buscó a su perra, y le hizo señas para q fuera a ella. Una vez a su lado. Harper miro hacia las sabanas, allí estaba esa sombra otra vez, x más q no pudiese verlo, sentía q la miraba, alarmada. Se alejó junto a Nana quien ya tenía la misma idea q ella.

Más adelante, se encontró a Bill, sentado en la vereda, quien, al verla tan asustada, se preocupó y se levantó.

-Hey ¿Q p-pasa? ¿Te en-encuentras bi-bien? – Pero ella no respondió, solo lo abrazó fuertemente, Bill paralizado, también la abrazó después de un tiempo analizando la situación, no preguntó más, sabiendo q ella, si quería, iba a hablar. Y así se quedaron, sin separarse.

•••