Capitulo 13: La mano de Hidan

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-Lo mas probable es que nos esten esperando... ¡Todavia no, Kakuzu! - Un clon de Konan estaba dando sus instrucciones pero un terco Kakuzu se escapaba a cada segundo.

Por quinta vez, Kakuzu corria y era devuelto por Konan.

-¡Hidan, nos esta esperando! -Alego el tacaño.

-Tio Kakuzu, primero hay que escuchar el plan -Intento calmarlo su sobrina Fuu.

-Kakuzu y Fuu seguiran a Raiga y Ranmaru. Los demas cubriran al grupo en caso de que haiga pelea -La pelea era mas que obvia. El clon los acompañaria hasta cierto punto donde la Konan real los esperaba, una mano de mas siempre es util.

Todos corrian a lo que podian, que el tesorero se les escapaba. Konan estaba al inicio del bosque que rodeaba el territorio de la secta, habia esparcido mariposas de papel por casi toda el area para tener una mejor vision del lugar.

-Raiga, ¿Por que el tipo de ojos raros, esta tan desesperado? -Cuestiono Ranmaru desde los hombros de Raiga.

-Mmmm, quiere ver a alguien -Fue su respuesta. Que si Kakuzu se veya desesperado, hasta murmuraba cosas de enjaular a alguien en una jaula de oro y esconderla de todos para la eternidad.

-Los miembros de esta secta, se conectan a su cuerpo a traves de ingerir su sangre. Son inmortales, todo lo que le suceda a su cuerpo le susedere al suyo, ¿Queda claro? -Explico Konan. Ranmaru y Fuu asintieron nerviosos, no les daba miedo el enorme y espeso bosque en el que habitaban inmortales que les gustaba destripar personas en nombre de su dios, si no la macabra mujer que parecia angel.

Se movieron a traves del bosque con Konan y Kakuzu a la cabeza. El bosque no era como los demas, el dia era soleado pero las coronas de los arboles no dejaban pasar la luz dejando al grupo bajo una inquientante sombra. Todos tenian la sencacion de ser vigilados, solo tal vez y Kakuzu aceptaria estar siendo vigilado por el dios de Hidan.

-Señorita Konan... -Llamo Ranmaru-Las personas se estan moviendo alrededor de la aldea -.

Konan dio una orden a traves de su comunicador. Era el turno de los demas.

Pain hizo su rutina de estiramiento, debia hacer bien lo que su angel le ordeno. El estaba con lo que restaba de espadachines y sus demas cuerpos estaban en otro punto del bosque.

-Hay que acercarnos y distraerlos. El punto es que Konan pueda pasar desaparcebida a si que, enloquescan todo lo que quieran -Explico Pain y el inicio la distraccion con un elegante Shinra tensei.

Pain estaba pensando en usar unos cuantos perros para entretener a los Jashinistas de no ser por Kisame.

-¡Ni en estos momentos te puedes comportar! ¡Te levantas y me inundas este bosque! ¡Ya! -Se quejo Pain. Kisame estaba en el piso abrazando su espada y murmurando el nombre de Itachi-¡Ahora no me tentare el corazon! -Declaro un furioso Pain mientras se arremangaba las mangas de su capa.

Mientras los demas espadachines peleaban con un pequeño grupo de Jashinistas, escucharon los gritos de Kisame siendo molido a golpes. Minutos despues Kisame se unio a la pelea a lado de sus compañeros.

-¡Bienvenidos a este dia tan especial!, Hoy uniremos en matrimonio a Hidan y su prometida bajo los ojos de Jashin-sama -Dijo lo que podria ser el sacerdote.

La boda era al aire libre, habia largas filas ocupadas y en las primeras estaban la madre de Hidan y sus hermanos. En el altar estaba Hidan vestido con una yukata negra y atado, y con una mordasa en la boca. Frente a el estaba su futura esposa vistiendo un kimono blanco.

-Pense que vendria -Murmuro para si Kida.

-¡Mama! ¡Mama! -Chillo el menor de sus hijos.

-¡¿Que quieres?!

Akatsuki sin trabajoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora