Sekiryuutei Supremo

Llamas de Voluntad y Propagación

-¡Y ahí va el último! – Yura destruyó el último de esas cosas que los estaban atacando. – Todo despejado Sensei.

-Buen trabajo chicas. – El caído bajo del cielo tras ver que en efecto todo había acabado. – Tch, ese mocoso logró huir. Al fin y al cabo, parece que son buenos en ello también.

-Azazel-dono... Hemos revisado toda el área y todo está despejado. – Ayame, quien usaba su vestimenta como kunoichi, y unos ninjas más aparecieron. – Parece que...

-Sólo quedan los mocosos esos que Ise y el resto están enfrentando ahora. – Serafall bajo del cielo, se le veía muy seria. – Capturamos a unos cuantos de los esos mocosos.

-Excelente, sólo queda esperar que los chicos nos traigan buenas noticias. – Azazel vio como las chicas del grupo Sitri se veían las caras algo preocupadas, era de la esperarse. – Ahora a esperar...

-Con todo respeto Azazel-dono ¿Cree que esos chicos puedan superar esto? – la pregunta de Ayame era muy válida, aunque tanto el caído como la Maou rieron. - ¿Eh?

-Lo sentimos, no es que nos riamos de ti es sólo que esa pregunta la hemos oído tantas veces que ya es gracioso. – Azazel se puso más sereno mientras Serafall se acercaba a la mujer.

-Esos chicos han hecho cosas increíbles este año Ayame-san, por ello es que tenemos fe en ellos. – Serafall miro el cielo con una sonrisa. Sabe que ellos no se rendirán...

Cuando las llamas lo rodearon, Ise se vio en ese lugar... el lugar que años fue donde interactuó con sus predecesores. Atrás de él, Alfa, Beta y Gamma se mostraban confundidos al igual que él... ¿Qué hacen aquí?

-Ise-chan, es hora. – En frente de ellos, Elsha quién fue el Sekiryuutei femenino más fuerte se mostraba feliz y tranquila. – Es hora de que sigas tu propio camino.

-Elsha... Tú...

-Así es chico, ya es hora de darte toda la batuta. – Al lado de la mujer, Belzard, el Sekiryuutei masculino más fuerte se mostraba en paz. – Ya no necesitas de mi o de Elsha. – A esas palabras el Sekiryuutei se horrorizo, ellos...

-No estés triste, esto debe pasar... Sólo somos trozos de memoria de quienes fuimos, morimos hace años y por ello es que sentimos que ya es hora.

-El resto seguirá contigo, aún tienen cosas que dejarte pero nosotros dos no, ya te dimos todo lo que podíamos... Es hora de irnos. – Ambos se acercaron al joven quien tenía la cabeza agachada. – Vamos, no lágrimas... no queremos que sea esta clase de despedida.

-Yo... Yo les debo tanto... sino fuera por ustedes, yo no... No sé si pueda...

-Puedes y lo harás, eres el Sekiryuutei Supremo. El que ha logrado más de una vez lo imposible. – Elsha se acerco al joven y seco sus lágrimas a pesar de que ella estaba llorando. – No estas sólo, puedes seguir creciendo aún sin nosotros. Por ello es que esta es la despedida porque sabemos que ya no nos necesitas.

-Sigue con ese espíritu que tienes Ise, aún en la oscuridad... vuélvete esa llama que guíe al resto, llévalos a ver ese bello atardecer al final del día. – Belzard puso su mano en el hombro de su kouhai. – Es el adiós, cuídate Sekiryuutei Supremo.

Elsha le dio un último abrazo y se alejo de él para luego mirar a los 3 Cosmic Packs.

[No diga nada, nosotros velaremos por el muchacho]

[No es que sea por un motivo en particular ni nada sentimental...]

[Je, lo que quiere decir es que... Avanzaremos todos al futuro]