Starlight [Supercorp - AU]

Capítulo XXIII: Cambios

Septiembre 29, 2015

-No puedes ir por la vida haciendo esas tonterías -decía Alex en susurros en el pasillo cuatro de la biblioteca-. Es mi novia, Kara

Quizá mi comportamiento grosero hacia Maggie me había traído al punto donde Alex me estaba reclamando con obvias razones

-En serio lo lamento -dije con sinceridad, podrían sentir la vergüenza teñida-. Fui algo idiota

No respondió, simplemente asintió pausadamente

-creo que si tienes algún problema con Lena Luthor, lo cual es evidente, será bueno que lo mantengas al margen de todo esto ¿no crees?

-eso... Supongo ya no será problema -conté en un susurro

Me miró aun colérica, suspiró un poco para después dejar la pila de libros sobre una orilla de los estantes

- ¿de qué estamos hablando ahora? -cuestionó cruzándose de brazos y recargándose dispuesta a escuchar

-Bueno primero, quiero que sepas que le ofreceré una disculpa a Maggie -era lo justo-. Y segundo, Lena y yo hemos hablado

Negó

-o sea, tu disculpa será porque has arreglado el asunto con Luthor...

-No -me apresure a decir, aquello se había escuchado mal

No lo creyó, después de todo no me había esforzado por convencerla de lo contrario

-continúa

-Sólo hemos dejado las cosas esclarecidas -explique recordando la noche de ayer-. Supongo que ahora todo será diferente

Y sinceramente así lo deseaba, me encontraba fastidiada del asunto de poca madurez que se tendía entre ambas

Alex me miraba aún con molestia, y comprendía aquello

-supongo que es bueno ¿no?

Me hundí en hombros, restándole importancia. Pero para mí desgraciada me importaba demasiado aquel tema con pudenta verde, era extraña la sensación que había aparecido después de la plática nocturna que término siendo en madrugada

No habíamos cruzado palabra alguna después de aquello, la razón era que ella se había marchado de la habitación demasiado temprano o al menos eso parecía en cuanto desperté

A mi mente venia la idea desagradable que probablemente ella no lo recordaba, Luthor y su grado de alcohol quizá habían presenciado una conversación instantánea sin importancia y olvidadiza... ¡Demonios! Aquello comenzaba a molestarme de manera poco lógica

Salí de la gran biblioteca, a paso rápido. Mi hermana se había perdido en su lectura sin agregar una sola palabra, el que me disculpara sería para después al parecer

Me dirigí a la cafetería más cercana, la universidad lucía poco transitada, un sábado donde probablemente aún se mantenían en sus habitaciones o de visita en sus ciudades. Me dirigí hacia la máquina expendedora sustrayendo las oreo que no podían faltar durante mi día, para después tomar asiento en una de las mesillas más cercanas. Había no más de diez alumnos en el sitio, perdidos en sus conversaciones o en algún libro. Podía considerar pasar mis fines de semana en la universidad, era admiradora de la tranquilidad y justo ahora era lo que se presenciaba, y ciertamente mamá se había vuelto demasiado exigente y su humor era bastante malo como para disfrutar de Bisbee