Starlight [Supercorp - AU]

Capítulo XLI: Lo Qué Sucedió

Todo parecía ser parte de una buena imaginación, cada detalle era tan nuevo como algo que jamás creíste tener. Lena acomodada a mi lado, perdida en un pentagrama al final de su carpeta con varios signos musicales los cuales al parecer estaba corrigiendo y a la vez, acertando en todo lo que el profesor David lanzara hacia la clase. Lena era alguien que parecía querer pasar ocho años en la universidad y eso era notable. También era alguien qué llevaba a cabo tales asuntos a la vez, quizá un prodigio musical con probabilidad.

Al salir de clase ahí estaba, fuera de cada aula esperándome, era difícil creer que todo este tiempo se dedicó a correr lejos de mí como una gacela. La mirada de nuestros compañeros era discreta, podía parecer confuso pues hace meses habíamos tenido un par de encuentros difíciles en donde ella daba a notar lo detestable y patética que le significaba, y dónde la palabra odio salió de mis labios

Winn era el menos disimulado, su atención se detenía en mí por varios segundos y al pasar a nuestro lado bajaba la mirada. No sé si Lena había notado aquello, aunque conociéndola seguramente tenía que dar la introducción de quien era Winn nuevamente. Mi saludo hacia él fue alegre pero no contestó, fingió entretenerse con su móvil y tomar un asiento lejano. Miré hacia Lena, quien mantenía los brazos cruzados por debajo de su pecho entregada a sus pensamientos

-iré a buscar a Alex -dije al salir de la cuarta clase

-bien, necesito ir a la biblioteca y arreglar un asunto con Lex -contempló la hora en su móvil

En ocasiones olvidaba que el director Alexander era su hermano. Un pensamiento oprimente vino a mi memoria, aquello dicho hacia mis padres donde Lena les decía que para hacerlos sentir mejor no habitaríamos el mismo sitio

-¿todo bien? -la idea me entristecía

-sí, será rápido -señaló guardando su móvil-. Es un hombre ocupado así que lo mucho que pueda ofrecerme son cinco minutos, tuve que hacer una maldita cita

No respondí, quedé en espera de cualquier información que pudiera negarme lo que pudiera hacer

-no veremos en clase -se acercó a mí dando un rápido beso tomándome nuevamente desprevenida

La vi alejarse por el pasillo con largos pasos, quedé como idiota viéndola

Al salir de mi trance, fui en busca de Alex. La universidad había quitado nuestro tiempo como hermanas lo cual era decepcionante. Extrañaba esas tardes en el sofá mirando alguna película, mientras una pizza familiar nos hacía el complemento.

Me adentre al edificio para después dirigirme a su habitación en espera de que pudiera estar en ella. Lo cual fue acertado, al llamar por segunda vez Alex apareció con una sonrisa sin animosidad

-hola -saludé alegre lo cual no fue suficiente, Alex es la persona más orgullosa que he conocido-. Escucha, lo lamento ¿de acuerdo?

Volvió hacia dentro y yo tras ella, parecía dispuesta a escuchar, me acomodé a su lado sobre su cama

-eres lesbiana -señaló, sabía que no era una pregunta pero realmente ese tema estaba confundido-. Me dijiste que no, en aquella ocasión

-lo sé y en verdad... no lo sé, quizá exista un instante en mi vida en que me detenga a pensar en ello -conté con sinceridad-. Pero ahora no sé si lo sea

Podía escucharse estúpido, pero ahora me parecía una etiqueta en la que no estaba lista en ser partícipe. Estaba segura de mis sentimientos por Lena, pero en mi mente no existía la palabra lesbiana para describirme así como nunca utilicé el heterosexual en cada presentación