Capítulo LXV: Ke-rha

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Agosto 2018

-¡Ke-rha! -aquella voz que venía directo desde su oficina me hizo poner en pie con demasiada rapidez, pude sentir como todo giraba a mí alrededor, necesité un par de segundos para estabilizarme. Tenía que entender que no podía sobresaltarme a todos los llamados de mi jefa-. ¡Ke-rha!

-Kara, mi nombre es Kara -corregí, sinceramente lo había dicho para mí. No quería provocar ningún percance en donde la señorita Grant me echara desde el balcón de su oficina

-¿todo bien, señorita Grant? -pregunté entrando al sitio iluminado en el cual podía sentirme demasiado pequeña ante la mujer menuda que podía hacer estremecer hasta al mismo Michael Myers

Cat Grant era la mezcla entre Anne Wintour, (si, aquella periodista de Vogue que había servido de inspiración para el personaje de Miranda Priestly) y Martha Stewart, dejando a un lado el escándalo legal, no me imaginaba a mi jefa presa, aún no.

-¿"todo bien"? ¿Crees que esto está bien? -preguntó desde su escritorio mientras elevaba una hoja impresa, no me miraba simplemente se encontraba en su poderosa silla, con aquellos lentes medio acomodados en su nariz prestando atención a su moderna laptop de diecisiete pulgadas

Caminé hasta ella, con la mano extendida olvidando los cuatro metros de distancia que existía desde la puerta de cristal hasta a su enorme escritorio parecido a uno presidencial

Tomé finalmente la hoja mientras trataba de entender que era lo que había mal en ella

-no entiendo, no hay ningún error ¿qué es lo que está mal? -pregunté para después amonestarme en silencio

Regla número uno para la supervivencia en CatCo, nunca por ningún motivo dudes de algo dicho por Cat Grant

-¿"no hay ningún error"? ¿Estás diciéndome qué exactamente, Ke-rha? ¿Qué estoy equivocada? -cuestionó y esta vez ahora si me miraba por encima de aquellos lentes de lectura

-No... No, no claro, no... En absoluto señorita Grant -el por favor no me despida estaba incluido en cada palabra-. Solo... ¿qué es lo que está mal?

-te pedí un comunicado para los accionistas, mira la fecha Ke-rha ¿que día es hoy? Dime, ¿que día crees que es hoy? -hizo un movimiento en su silla

Se está levantando, Kara, es hora de huir. Puedo ahorrar tiempo si salto por el balcón por propia decisión, sería menos humillante ¿cierto?

-miércoles... veintidós de agosto -contesté pudiendo respirar nuevamente al verla solo acomodarse

-¿y que dice tu papel?

-agosto veintitrés

-¿cómo se supone que voy a impartir una junta sino hay nadie en la junta, Ke-rha?

Ajuste mis anteojos, las palmas de mis manos estaban mojadas y mi boca comenzó a secarse

-pero... yo... usted dijo -regla número uno, Kara, no olvides la regla número uno-. Debí escuchar mal

-no, no, tú debiste confirmar la fecha antes de enviarlo

-yo le pregunté un par de veces...

-¿cuándo? -cuestionó volviendo a su laptop

-el día martes y el día de ayer por la mañana...

-ese es el problema, cambié de opinión por la tarde -respondió con simpleza

Regla número dos, estar al tanto de los pensamientos de la señorita Grant

Starlight [Supercorp - AU]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora