Cada palabra ahí estaba. Había olvidado todo a mí al rededor, pues aquellas hojas gastadas por el tiempo me conservaban detenida en el año dos mil quince, mi madre me mantenía sumerja entre las letras de sus recuerdos y cautivada por su historia en la que ahora me sentía incluida. Me parecía maravilloso cada simple detalle de su vida, como si pudiera presenciar cada día narrado, como si pudiera sentir aquellos pensamientos que plasmaba.
Había escuchado sobre lo sentimientos del lector hacia una novela, sabía que la admiración hacia un personaje o el amor hacia este, era una situación en la que te involucrabas demasiado en la historia ¿pero qué pasa cuando lo narrado te involucra en el futuro? Lena Luthor no era simplemente un personaje, se trataba de la mujer que había hecho feliz a mi madre, su primer y último amor al parecer. Y si la sinceridad volviera a correr por mis labios yo ya había comenzado a estimarla.
Cerré el no diario, el sentimiento convertido en lágrimas comenzó a fluir. Mis ojos y mejillas se humedecían y el pensamiento con él que ahora ya no debatía volvió a quedarse para siempre. Yo no era la chica estúpida, no me detendría nuevamente frente al espejo y entrar en comparaciones con aquella fotografía de mi madre y Lena. La obvia razón del parecido y el que portara su nombre estaba ahí...
- ¿debo llamarte madre ahora? -cuestioné hacia la foto
¿Qué podría significar aquello? ¿Qué mi madre durante mis quince años no era mi madre? ¿Qué ambas lo eran?
Limpié las lágrimas con el dorso de mi mano, quizá parecía una demente hablando con aquella vieja fotografía, pero ¿qué más podría hacer? las respuestas estaban sobre mi mano, escrita en líneas.
Quizá mis dudas se desaparecerían si mi atención fuera hacía las últimas hojas, negué nuevamente desechando la idea que había venido a mí con anterioridad. No podía permitirme aquello, necesitaba saber las razones por las cuales la historia había transcurrido de la manera más silenciosa que mi mamá sobrellevó
- ¿por qué nunca me hablaste de ella? -Esta vez el cuestionamiento fue hacia la imagen de mamá-. ¿Que fue tan terrible que ni siquiera te hayas atrevido a nombrarla?
Caí sobre mi cama, en espera de que el sueño viniera por mí, deseaba por única vez que los pensamientos abandonaran mi mente, al menos por una noche.
Podía imaginar a tía Alex y Maggie en el sofá con aquella preocupación por mi estado refugiado entre las cuatro paredes en medio de una historia medianamente reveladora aún. Podía imaginar a Brainy tocando mi puerta pidiéndome salir y sentir nuevamente el aire en mi rostro. No sé cuántos días habían pasado, y sinceramente había dejado de importarme
No quería dejar transcurrir un día en el que perdiera la oportunidad de descubrir la verdad, aquella verdad que había comenzado a no dejarme vivir del todo según Maggie y Brainy, era normal verlos merodear mi habitación las últimas semanas en donde me pedían dejar el no diario al menos un día, claro era que sus palabras eran tan solo pedidos fuera de mi alcance
El espeso sueño comenzó a acentuarse, la hora alta como ya se había hecho costumbre llegó acomodándome en el supuesto descanso que podía tener. El intento de que mi mente se sintiera olvidada de mí al rededor...
_____________________________________________
- ¿comenzaras una discusión? -preguntó ella con una media sonrisa
-El que este callada no significa que siga molesta por tu nada agradable broma -dije para después morder la hamburguesa doble
-Bien -dio un sorbo a la soda sabor naranja que dio levemente color a sus labios
-me gusta disfrutar de mi comida en silencio -me hundí en hombros-. Y más si se trata de una hamburguesa doble con queso
Negó aún con la sonrisa colocada
ESTÁS LEYENDO
Starlight [Supercorp - AU]
Fanfiction"Mi madre solía contarme historias escritas por ella. En su anunciada muerte, me encontraba en el cobertizo buscando tales historias, pero hubo un libro en manuscrito que captó mi atención... sus vivencias con la egocéntrica Lena Luthor"