Tiffany vuelva a tener intimidad con su esposo, es imposible evadirlo por siempre y no hay razón para hacerlo, se ha entregado a él como normalmente lo hace experimentando las mismas sensaciones, no hay duda que ama a Siwon y que el placer es el mismo.
Esa mañana de sábado despierta sola, razona que su esposo debió levantarse a hacer ejercicio así que se arregla tomando una ducha rápida y luego vistiendo con ropa deportiva, se dirige a la cocina y se prepara una taza de café.
Aún le pesa la situación con Jessica, no se ha alejado de ella como sus amigas le aconsejaron pero si la está evitando, por ejemplo ya debería estar despertándola y llevándole el desayuno a la cama al tiempo que estaría hablando con ella de cualquier tema, y no, está ahí reprochándose una vez más su acción impulsiva, por la que se odia. Es consiente que salto sobre Jessica en su momento vulnerable, que ella le correspondiera el beso es su alivio ya que marca que no fue un aprovechamiento sin más.
Son dos días de guardarse distancia desde la ocasión en que le descubrió los mareos, ya le parecen una eternidad y le está costando mucho mantener distancia.
Con la taza de café en manos va a la fachada de casa a esperar por Siwon, que debió salir a correr y justo lo encuentra en la casa de al lado, ha regresado pero ahora está ayudando a la vecina a mover objetos pesados al garaje. Tiffany se les queda mirando pensando en otras cosas, reacciona cuando su esposo ha terminado y es saludada por la mujer mayor a la que este ha ayudado.
Tiffany se vuelve al interior de casa con su esposo apurándose a hacer lo mismo.
—Yo me ofrecí a ayudarla, fui yo. —Siwon le explica a sus espaldas, teniendo miedo de haberla hecho enojar pues recordemos lo celosa que es.
—Está bien. —No le ha importado en lo mínimo.
—¿Y el drama? No has hecho escándalo. —Y quizás ni debería pedirlo.
—Es una señora de cincuenta años o más.
—Por la que ya te has puesto celosa en otras ocasiones. —Siwon realmente no la entiende, por menos le ha hecho grandes escándalos.
Tiffany pasa a extrañarse de que sus celos no brotaron, sin embargo, decide no darle mayor importancia. —Pues ya madure.
—Me encantas. —El la toma de las mejillas y la besa en los labios. —Voy a ducharme y llevamos a Jessica al hospital.
—Yo la llevo, no preocupes. —Él no se opone, la besa por segunda ocasión y toma camino a la habitación.
Tiffany va a la cocina con la intensión de buscar el desayuno de Jessica y llevárselo, lo que es innecesario al encontrarla ahí lavando los platos que acaba de usar, cosa que apenas y tiene permitido luego de una larga discusión pasada.
Jessica se empeñaba en mantener la casa limpia y obviamente Tiffany le prohibió hacerlo, así que lo máximo que llega a pasar es Jessica lavando los trastos que ensucie y ayudando mínimamente a limpiar la casa.
—Ya has desayunado y estas lista, pongamos marcha a tu cita con la terapeuta. —Por ello la ida al hospital, esa visita al psicólogo semanal.
—Estaba pensando que podría ir sola, ya puedo caminar bien así que tomaría el autobús. —Su tono de voz da tristeza, es igual al de los primeros encuentros.
—Ni hablar.
—Quiero empezar a valerme por mi misma.
—Y lo haces, duermes sola, nos cocinas para comer en las tardes, te duchas sola que no es como que yo te haya ayudado antes.
—Te habría encantado. —Murmura siendo escuchada por poco.
—¿Qué dices? ¿Qué insinúas? —Se lo toma a juego y claro que es en esa forma.
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Can't Stop Fallin' in Love
FanfictionUn pasado lleno de mentiras hizo su presente tan falso. Tiffany sólo quería una amiga, encontró algo más que simplemente no pudo parar. Jessica es misteriosa y sus razones son pesadas y tristes. Continuamente se cuestiona si algún día podrá ser fe...