Mi padre volvió a realizarme una corta visita. Hallem solo me dio un reconfortante abrazo, me prometió que estaría a salvo, se aseguraría de que tuviera una vida pacífica y no tendría que preocuparme más por nada. Tengo toda mi vida para readecuarme y adaptarme nuevamente. Tras ello me dejó descansar; ya que me dormí entre sus brazos profundamente.
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Lillest no solo estaba agotado física y energéticamente, si no que la ansiedad lo carcomía por dentro.
- Deja de dar vueltas en la celda... es molesto – Se quejó Rukh, mientras intentaba dormir – Él único que se convirtió en humano eres tú, estar aquí sin agua me sofoca ... y escucharte no me ayuda ...
- No puedo evitarlo, ya es el tercer día... no sé nada...
- Je.. – Se levantó del suelo – Quizás ese es tu castigo – Se asomó a los barrotes – Tortura psicológica... - Rió - o... simplemente se olvidaron de ti.
- Rukh, no estoy de humor.
- Tenemos un problema entonces, cuando no soy el "sarcástico" se suelta la bestia ... y creo que ese lado te gustará menos...
- Pfft sin agua, no tienes la fuerza suficiente...
- Como se esperaba de un galeno... – Se dejó caer en el suelo – No se le puede engañar...
- Usa el camastro...
- No
- Rukh...
- Estoy acostumbrado al suelo, será una molestia intentar dormir en algo tan incómodo. – Cerro sus ojos acomodándose para dormir – Úsalo tú si quieres.
- Hey..
- ......
- Gracias por cuidar de Abril.
- No hice nada especial, solo le di una daga para defenderse.
- Hmmm.
- No me gustan los humanos, no lo olvides.
- Lukha la encontró porque te siguió, ¿No es así?
- .....
- Quiera o no admitirlo – Se sentó a su lado en frío suelo. – Ella estará bien en el palacio... aunque preferiría monitorearla yo... - lo miró de reojo - ¿Por qué no te gustan los humanos?
- Me recuerdan lo que so.. – suspiró -fui...
- Abril no fue esclava...
- ..... – Rukh lo miro serio - ¿No lo es...? Una vez tienes el sello no se borra.
- Pero Lefkó lo cierra... - Suspiró – Al inicio me frustró ... pero ahora... tras todo lo que ví, gracias al concejo ... Creo que es mejor así, quiero que su amor por mí sea sincero y no lo lograré con el sello. – Lo miró de reojo, Rukh tenía los ojos cerrados y el ceño fruncido. – Así que... cuando salgamos ... ¿Intentarías llevarte bien con ella...?
- Si es que salimos... no veo la necesidad de hacerlo.
- Bueno... soy el consorte de Abril... - Miró la celda, intentado no reír pues Rukh nuevamente hablaba en idioma humano – y como tal debo volver a su lado... - Lo miró – Pero tú eres mi amigo...
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La prisión de Zión: Libro III - Ragness
RandomEnfrentada a un suicidio para regresar a reencontrar a Mellias. Abril se vera obligada e encarar a un destino nunca imaginado.