Cap. 7. Parte 2

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Las hermanas Akira y Amaya salieron de la jefatura y se dirigieron a un pequeño local de comida china que le pertenece a un joven chino amigo de Akira: Han, hijo adoptivo del viejo maestro del kung fu antiguo: Zhou Dohko Cheng. Han llegó a Japón con la intención de estudiar, pero al llegar él solo no tenía casa ni dinero, hasta que se topó con Akira en su camino, y con un dinero que ella le regaló, levantó un pequeño restaurante de comida china, el cual ha ido creciendo poco a poco. Akira y su hermana suelen frecuentar mucho el restaurante de Han, pues el chino es un experto en la gastronomía de su país de origen.

-Bienvenidos al restaurante Lu-Shan... disfruten de la deliciosa comida del señor Han- les daba la bienvenida un joven tibetano, a quien Han conocía desde la infancia y que también tenía condición de inmigrante y gracias a Han tenía un trabajo con el cual sostenerse.

-Buenas tardes joven Mu... mucho tiempo de no vernos

-Hola muchachas... pasen, pasen... sean bienvenidas al restaurante- Mu las dirige a una mesa sólo para ellas dos- siéntese, que yo hoy las atiendo... ¿qué desean comer?

-Dile a Han que lo de siempre, él ya lo sabe- le responde la rubia de lentes

-Enseguida muchachas... disfruten la estancia- les respondió Mu de manera amable y se fue a decirle a Han lo que las hermanas deseaban comer

Y mientras la comida estaba lista...

*Akira escribe un mensaje y lo envía a varios contactos... pip... se fueron los mensajes*- listo- decía Akira al oír el pip de mensaje enviado.

- ¿Qué haces hermanita? - preguntó Amaya curiosa

-Enviando el mensaje de la reunión a Tyson y Shana... digo, ellos también tienen que asistir ¿no?

-Desde luego Aki-chan! Mis sobrinos siempre son bienvenidos en casa... ellos hacen entretenidas las reuniones desde que eran peques

-Jeje... si, es divertido las cosas que ellos cuentan y hacen... y dime ¿Ozzy irá?

-Me costó convencerle... ha estado pasando momentos duros en su matrimonio

- ¿Y eso? ¿ahora qué hizo? - preguntó Akira con un tono enfático

-Pues verás... Solidad le halló unos mensajes de una tal Laura y ya sabes el resto

-Ummm... ¿otra vez anda de perro? Ozzy nunca va a cambiar- negaba la rubia mayor con la cabeza, Akira ya sabía que el comportamiento "don Juan" de Ozzy siempre lo mete en líos con Solidad, su esposa, quien a pesar de todo lo que Ozzy le hace, le sigue aguantando sus infidelidades con tal de que Sienna no se quede sin su padre.

-hummm... Ozzy es un caso perdido, jamás aprenderá y si lo hace... lo hará por la mala

- Y cambiando de Ozzy a ti... noté que cuando James te preguntó por tu familia, le contestaste con un tono apagado... dime... ¿pasa algo? ¿problemas maritales? - preguntó preocupada Akira

-Ehhh... no... no es nada... sólo que John y yo hace mucho que estamos distanciados... no confundas con estar peleados... pero sí me he distanciado de él... como que ya no tenemos mucho como pareja... nos amamos, respetamos y esas cosas... pero como que ya no tenemos mucho en común, salvo Cassandra y Fedra, que es lo que me mantiene unida a él- aunque el tono era apagado, a Amaya no le dolía lo que decía sobre su vida marital y familiar... sabía que con el pasar del tiempo, las cosas con su esposo iban a decaer, a pesar de que se aman con todo su ser, parecía que las cosas entre Sir John Van Auger y Amaya están bien, pero a la vez mal, quizás la diferencia de edad entre ambos (John le lleva masomenos como 17-18 años de diferencia a Amaya) las cosas cambiaron. Al menos, el amor que se tienen el uno al otro les impedía cometer alguna estupidez por la falta de cariño, parece ser que el saber que aún se aman les era suficiente.

No Hay Nadie MasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora