Cap. 6. Lo salvaje y prohibido... me encanta (Cap. +18 aún más explícito)

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Después de la experiencia que tuvo la noche anterior con Charlie, Akira no dejaba de pensar en la propuesta que le hizo después del baño, estaba tentada a confesar los sentimientos que tenía hacia él, pero sentía que no era el momento aún, tenía que planear todo bien, quería que las cosas fueran bien entre ambos antes de decirle lo que siente por él, así por el momento seguirían tal cual: haciendo el amor apasionadamente cada noche como él en apariencia se lo estaba sugiriendo. Charlie, por su lado, no dejaba de pensar en la experiencia tan hermosa que había tenido con Akira, pues al contrario de ésta, Charlie sintió más esto una experiencia de amor que de placer, aunque no podía negar que su primera vez con Akira se sentiría así de rico y excitante, le había fascinado la experiencia y quería ir por más.

A la mañana siguiente...

-Ummmm... qué buen día hace hoy... ¡ay!... estaré relajada todo el día- la rubia se había levantado de muy buen humor y estaba con ganas de hacer de todo, el haber hecho el amor con Charlie la tenía con los ánimos altos y estaba dispuesta a trabajar ese día y en la noche trataría de convencer a Charlie de hacerlo nuevamente.

-Muy buenos días Akira... ¿cómo amaneció mi rubia consentida? - Charlie se había levantado esa mañana con el pie derecho, estaba de buen humor y saludó a la rubia abrazándola de manera muy cariñosa.

-No sabes... dormí tan relajada que hoy me siento con ganas de trabajar... ay qué bien la pasé anoche- la rubia correspondía tiernamente el abrazo a Charlie

-Yo igual, me siento otro, como nuevo, renovado... creo que lo de anoche me sirvió de mucho para descansar al relax- respondía el rubio sin dejar de abrazar a Akira

- Y dime Charlie... ¿tienes planes para hoy?... yo al menos sí, debo ir a ver a mis muchachos a SAINTS... yo supongo irás a trabajar... ¿te doy un ride?

-No Akira, muchas gracias, me iré por mi cuenta... bueno... no sé si puedas prestarme ese BMW que tienes ahí afuera... no sé si es tuyo o de alguno de tus hijos- decía el rubio, señalando un hermoso BMW color azul oscuro que estaba parqueado frente al garaje.

- ¿Lo quieres? Anda, te lo presto, es mío, úsalo si gustas

-Gracias, prometo cuidarlo

-Descuida

Mientras desayunaban, Akira buscó entre las llaves del guarda llaves de la cocina, las llaves del BMW que ya tenía en desuso y esperaba que funcionara, pues ya llevaba casi un año de inactividad. Pronto encontró las llaves y se las dio a Charlie.

-Espero ese auto arranque, llevo casi un año de no usarlo, lo compré porque me gustaba y luego vi ese gran Mitsubishi Montero... ahhhh... qué bello auto... en fin... termino de desayunar y me voy al trabajo, debo ir a ver cómo están las cosas en SAINTS

-Espero que sí, y a todo esto... ¿qué es SAINTS? Me suena un tanto curioso el nombre

-Jeje, sabía que preguntarías eso... SAINTS es el departamento policíaco que opera en cuidad de Neo Tokio... y lo más increíble del asunto... fui yo quien lo fundó.

- ¿Cómo? ¿tú fundaste SAINTS? - preguntó Charlie con curiosidad.

- Así es... busco siempre luchar por la justicia, y qué mejor manera de hacerlo fundando mi propio departamento de policías, todos entrenados adecuadamente... siempre estamos para servir y proteger.

-Me alegra que estés en el camino del bien, como cuando estábamos en las fuerzas aéreas juntos, ¿lo recuerdas? - habló el rubio con un tono nostálgico

-Sí, lo sé Charlie... bueno... te dejo, debo irme... qué tengas buen día, te quiero Charlie- se despedía la rubia, dándole un beso en la mejilla.

No Hay Nadie MasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora