Vieron a un fan sacándoles fotos, y cayeron en cuenta de que, seguramente, había sacado hasta cuando se estaban besando.
Varios fans comenzaron a rodearlos, mirándolos con enormes sonrisas. Keith intentó cubrir a Lance con su cuerpo.
-¿Ustedes están saliendo en serio?- preguntaban a gritos, dejándolos cada vez con menos espacio.
Ninguno contestó, pero, mientras nadie los miraba, Keith echó su mano atrás y Lance entrelazó sus dedos. Fruncieron los ceños. El griterío no hacía más que aumentar. El espacio no hacía más que disminuir, a tal punto en el que Lance terminó acorralado contra la pared, con el cuerpo completamente pegado y con Keith adelante.
-¡A ver, a ver! -interrumpieron. Todos los gritos callaron. Keith se alejó un poco de Lance y él pudo despegarse de la pared-. No son cosas, son personas. ¿Por qué los tratan tan mal? Son unos irrespetuosos. Además, ¿qué tiene de malo que estén saliendo?
-Krolia...- murmuró Keith, quien fue callado por ella.
Todos estaban mirando a la entrada del edificio. Krolia estaba cruzada de brazos, con el ceño fuertemente fruncido.
-Por favor, maduren y déjenlos vivir en paz -repitió, poniéndose frente a Keith y Lance, como si los estuviera cubriendo, y entrecerró los ojos.
Intimidó a todos los fans y salieron corriendo de allí. Algunos soltaban torpes disculpas y otros tropezaban con sus propios pies. Keith frunció el ceño. ¿Tanto miedo daba Krolia?
-Entren -ordenó ella, empujándolos al interior de la propiedad- antes de que vuelvan.
Entraron y Krolia cerró la puerta con llave, asegurándose de que ninguna persona ajena al edificio intentara seguirlos.
Subieron los 10 pisos y entraron al departamento.
-¿Quieren agua?- preguntó, cerrando la puerta detrás de ella-. Hace mucho calor afuera.
-Sí -contestaron al unísono Keith y Lance mientras se sentaban en el sillón.
-Mierda...- susurró Keith, pasando la mano por su rostro. Suspiró-. Se está volviendo insoportable todo esto -comentó, escurriéndose en el sofá-. No sé cuánto más pueda soportarlo.
Lance se acostó a su lado.
-Hey, tranquilo. Estamos juntos en esto. Nadie va a poder hacernos daño -respondió, apoyando la mano en la cabeza de su novio.
Keith apretó los labios. Lance le acarició la nuca.
-Tienes razón... -murmuró, recostándose en las piernas de Lance. Él le acarició el pelo con cuidado-. Pásame mi laptop. Voy a buscar una película para que veamos.
Lance se estiró, tomó la laptop (estaba en la mesita ratona) y se la dejó en el abdomen.
Keith la abrió y la encendió. Sus ojos se abrieron exageradamente cuando lo último que quería ver cobró vida frente a él.
-¡NO PUEDE SER! -gritó, levantándose de golpe e inclinándose más sobre la pantalla.
Lance lo miró confundido.
-¿Qué ocurre? -preguntó Krolia, saliendo de la cocina con los vasos con agua.
Keith volteó la laptop y les mostró la pantalla.
Las fotos que los fans habían sacado de ellos besándose estaban haciéndose virales, circulando por todo internet. Además, se levantaron diversas teorías y rumores sobre ellos.
Keith dejó la computadora en las piernas de Lance para que siguieran viendo. Se agarró la cabeza con las manos y jadeó.
-¡Odio esto!- gritó, levantándose rápidamente del sillón.
Sus piernas temblaron, presa de la ansiedad, y cayó al piso. Comenzó a llorar.
-¡Keith! Ya, cálmate. Vamos, chico -dijo Lance, levantándose de golpe y tomándolo de ambos brazos, apegándolo a él. Keith hundió la cabeza en su pecho y sollozó. Le acarició la cabeza-. Sh... Tranquilo.
Keith apretó la remera de Lance entre sus dedos. Krolia se acercó a ellos.
-No puedo soportar que se metan así en nuestras vidas -hipó-. Yo quería tener una relación normal, pero parece imposible.
Se separó de Lance y pegó la espalda contra la pared, agarrándose de las rodillas, haciéndose bolita. Lance y Krolia se acercaron a él.
-Lo entiendo. Mira, yo me siento igual, pero ¡estoy tranquilo! -dijo Lance, sonriendo, intentando alegrarlo. Keith lo miraba en silencio-. ¿Sabes por qué? -Keith negó-. Porque sé que seguirás a mi lado, sin importar qué -contestó, agachándose frente a él.
Corrió un largo mechón de cabello de su cara y lo besó, abrazándolo nuevamente.
-Eso espero...-pensó Keith, correspondiendo el abrazo y escondiendo la cabeza entre su cuello y su hombro.