my four idiots ✧ mgc (book #1)

xv

Antes de empezar el cap quiero decir esto.

Pensé que nadie leería esta novela pero en realidad me equivoqué. No soy tan buena escribiendo pero sí que sé dejar a las personas con la curiosidad. Muchas gracias por leer, lo agradezco.

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Estábamos en la sala Michael, Luke, Ashton y yo. Calum estaba en la cocina preparando la comida para ver la película que yo no sabía cuál era.

Michael estaba en su celular revisando algunas cosas »supongo« mientras que Ashton y Luke conversaban. Yo por mi parte, estaba sentada en el suelo sin decir una sola palabra. Solo estaba ahí, sentada. Como el pequeño cero a la izquierda.

Michael dejó su celular a un lado y se sentó al lado de mí. Lo miré de reojo y nos quedamos callados por un momento hasta que Michael habló.

—En el resto del día no has dicho palabra alguna —Dijo Michael en mi oído— ¿No te sientes bien aquí?

—Tanto chico... claro que no me siento muy cómoda —Dije mirando hacia otra parte.

—Sé que no te sientes cómoda estando con chicos pero mira —Señaló hasta donde estaban Ashton y Luke— Ellos te violarán si sigues incómoda.

Yo reí a carcajadas. Lo dijo de una manera graciosa, me estaba muriendo de la risa. Mi risa resonaba por toda la casa y los chicos me miraron con cara de confusión hasta que paré de reírme.

—¡Culpen a Clifford! —Exclamé levantándome del piso— ¡Él me hizo reír!

Calum frunció el ceño de manera divertida y yo no pude evitar reírme. Estos chicos eran realmente graciosos y yo como una tonta despreciándolos.

—Aquí traigo los bocadillos —Dijo Calum con dos bandejas en la mano.

Luke iba a coger un pedazo de la comida y Ashton arrebató su mano. Luke hizo un puchero y Ashton empezó a decirle "niño malo" que infantiles.

—¡Lucas Robert Hemmin! —Exclamó Michael señalándolo— ¡No te comas la comida!

—¡Es Hemmings! —Respondió Luke a gritos también.

—¡Callen la puta boca! —Gritó Ashton.

—¡Mierda, a ver! —Exclamé yo haciendo señas para que se callaran— ¿Es así todo los días?

—Todos los días de nuestra vida —Respondió Ashton y todos empezaron a reír.

Estos chicos me empezaban a confundir más.

—Bueno ya. Vamos a ver la película —Dijo Luke de repente y todos se sentaron.

Luke, Ashton y Calum se sentaron en la parte derecha donde estaba el sofá y Michael y yo nos sentamos en el lado izquierdo. Calum me miró mientras movía las cejas y yo reí.

—Oye bonita, no te duermas —Susurró mientras reía en mi oído.

—No te puedo prometer nada Michael, eres un bobo —Golpeé su hombro y ambos reímos de manera baja.

La película empezó. No era de terror, por lo menos. Era una película algo así como familiar. Me acomodé en el pecho de Michael y él me abrazó.

Eso se veía muy romántico.

Siete y cuarenta y cinco.

Después de unos cuarenta y cinco minutos me empezó a dar un poco de sueño. Miré la hora y eran las siete y cuarenta. Michael aún seguía abrazándome y estaba muy concentrado en la película que ni se dio cuenta de lo que estaba haciendo.

Me moví un poco, cerré mis ojos y sentí la mano cálida de Michael encima de la mía. Fruncí el ceño y quité mi mano sutilmente para que no pensara que no quería que hiciera ello aunque seguramente se había dado cuenta ya que suspiró levemente.

Volví a cerrar mis ojos hasta que me quedé dormida.

[...]

Todo estaba oscuro. Lentamente abrí mis ojos y ahí estaban. Michael, Ashton, Calum y Luke, mirándome con preocupación. Entonces miré a mi izquierda y vi el suero, estaba en un hospital.

—¿Qué me ha pasado? —Pregunté en un sutil tono.

—Nunca había oído a Crystaline hablar así —Dijo Calum y todos empezaron a reír.

—Chicos... ¿Qué me ha pasado?

—Tú padre te disparó pero ahora estás bien —Me respondió Ashton.

—¡Mierda! —Exclamé mordiendo mi labio— ¿No te pasó nada Michael?

¡Bum! Desperté.

¿Dónde mierda estoy? Todo está oscuro. Muevo mi mano y ahí está Michael. Él se mueve hacia mí y besa mi mejilla.

—Crystaline, te quedaste dormida —Murmuró Michael— No te preocupes, llamé a tú casa y tú madre dijo que no habría problema con ello.

—No, Michael, no. Tengo que irme —Le dije levantándome de la cama— ¿Dónde están mis zapatos?

—Crystaline, son las dos de la madrugada y es peligroso salir a esta hora. Quédate, no quiero que te pase algo.

Michael me tomó del brazo. El piso estaba frío. Hacía frío. Después de ese sueño que tuve no pensé que me atrevería a salir a la calle hasta llegar a mi casa porque era bastante peligroso a esa hora.

—¿Qué día es hoy? —Cuestioné. Sábado. Me iría en la mañana para no hacer más molestias- me iré en la mañana antes de que ustedes se levanten. No quiero ser una molestia.

—No eres una molestia. Lo sabes, ¿Verdad? —Sentí como me soltaba y oí sus pasos. La habitación estaba a oscura y solo la luna la iluminaba.

—Oye Michael —Dije— ¿Te gusto?

En ese momento, en ese instante un silencio se presentó en la habitación. Todo estaba oscuro y yo estaba en el medio del cuarto jugando con mis dedos. Oí los pasos de Michael acercándose a mí.

—¿Por qué preguntas tal cosa? Es un secreto que tú ni nadie lo tiene porque saberlo. Es mejor que dejemos esto así y yo me vaya al cuarto de Ashton.

—Michael no quise que te enojaras, solo era una pregunta, nada más.

—No me gustaría responderla porque tú no lo aceptarías. Eres complicada y a pesar de todo lo que he hecho para ser sólo tu amigo lo estoy logrando poco a poco. Pero será completamente difícil lograr lo que yo quiero. 

Escuché la puerta cerrarse. Yo me quedé sola en medio de esa habitación pensando en todo lo que Michael me había y dicho. Me di cuenta de que todo esto era solo por un motivo. Solo por uno. Pero el hecho que yo esté hecha pedazos no significa que tenga que despreciar todo lo que Michael ha hecho solamente para ser su amiga, solo para eso.