GUARDIAN'S LOVE I; PRIMER LIBRO DE LA TRILOGÍA "YOU"
Existe el mito de que en alguna Tierra paralela, los más viejos y sabios de ésta se dedican a criar guardianes, seres con dones y particularidades tanto peculiares como especies "programados" a de...
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»6. Cisco y los secretos del equipo. «
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LA CITA SALIÓ MEJOR DE LO PLANEADO. Barry definitivamente había disfrutado una buena velada en compañía de la detective Patty Spivott, la cual terminó descubriendo su actual situación de invalidez. Fue una anécdota de la que se pudo reír después con la chica, cosa que terminó aliviándolo por completo al igual que a su amigo, Cisco, quien también se divirtió ayudándole al de ojos verdes con su cita a ciegas. La rubia se mostró demasiado comprensiva para la suerte del castaño, y ambos culminaron la noche con un extraordinario beso que Barry había estado deseando experimentar desde que escuchó su risa tras contarle un pésimo chiste. Era como si nada pudiese arruinar la noche del velocista después de tanta alegría experimentada y tanta adrenalina por pensar en la posibilidad de se descubierto, cosa que al final dejo de importar.
Luego, tras una llamada de un Cisco consternado y nervioso, se arruinó.
Kailan Bennett estaba sentada en el sofá más grande de la sala de su casa, con las rodillas sosteniendo su barbilla mientras sentía un revoloteo incomodarla desde su estómago. Sabía que había estado así desde que abandonó los laboratorios, justo antes de que Barry pudiese pedirle ayuda a Cisco con su cita y de que Iris volviera a abrir la boca, cosa que probablemente la habría obligado a vomitar unas cuantas palabras ofensivas y que eso trajera una discusión con su mejor amigo; prefirió evitarse eso. Las manos le sudaban de vez en cuando, mientras veía alguna película vieja a blanco y negro que pasaban por televisión su corazón daba un vuelco en su pecho, y no sabía exactamente por qué. La respuesta era obvia, esas emociones no eran suyas, pero eso lo único que hacía era alterarla incluso aún más. ¿A caso su humano estaba sintiendo todo eso con alguien más que no fuese ella? Según su padre, no podría ser posible, pero... ¿Y si sí lo era?
Cuando está dispuesta a irse a dormir junto a su padre a pesar de que definitivamente no es la hora para rendirse a los brazos de Morfeo, recibe una llamada tras otra de Cisco Ramón. No esperaba nada de él porque sabía que estaba ocupado con la cita de su mejor amigo, así que era claro que tendría que ser algo urgente. Suspira y atiende la llamada, acomodándose mejor sobre el sofá.
