GUARDIAN'S LOVE I; PRIMER LIBRO DE LA TRILOGÍA "YOU"
Existe el mito de que en alguna Tierra paralela, los más viejos y sabios de ésta se dedican a criar guardianes, seres con dones y particularidades tanto peculiares como especies "programados" a de...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
» 1. De vuelta en Central City. «
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
KAILAN BENNETT sale de la fisura y ésta se cierra detrás de ella, apagando por completo esa luz cegadora que la misma proyecta cada vez que está abierta. No estaba realmente acostumbrada a viajar entre Tierras paralelas -podría decirse que es su segunda vez desde que su padre la había llevado al fuerte mientras dormía-, así que le toma todavía unos segundos acostumbrarse a la oscuridad del lugar donde terminó después del corto y rápido viaje.
Con la maleta bien aferrada a su cuerpo y su brazalete de plata casi pegado al rostro, sólo por si necesita ayuda inmediata de Samira, mira a su alrededor. Todo parece tan... austero, si lo compara con la tecnología con la que el fuerte contaba. Ni siquiera hay luces que se encienden al detectar calor térmico, o paredes táctiles que la ayuden a descifrar en qué parte se encuentra. Claro, eso no quita que probablemente esté en uno de los lugares más avanzados de la ciudad, y de la Tierra en sí. Hasta dónde recuerda, llegó totalmente impresionada al fuerte de la otra Tierra cuando vio tantos avances tecnológicos al alcance de su mano, más allá de lo que alguna vez imaginó tendría en su supuesta Tierra natal.
—Samira —dice al aire, segura de que su IA contestará.
—¿Sí, señorita Bennett? —su voz robótica, por extraño que suene, le parece un halo de tranquilidad en medio de tanta oscuridad y soledad. El no sentirse tan sola de repente, la distrae por apenas un segundo, antes de volver a concentrarse en su entorno. ¿Por qué los maestros tuvieron que dejarla botada en medio de un cuarto tan extraño?
—Enciende las luces, por favor —nada más decirlo, el lugar se ilumina instantáneamente. Suelta un largo suspiro—. ¿Dónde estamos?
—Un segundo, por favor —Kailan hace un ruido de asentimiento mientras camina hacia delante. Una especie de caja de plástico reforzado con algún metal seguramente básico se encuentra abierta, las compuertas extendiéndose una arriba y la otra abajo. A su lado, una pantalla táctil apagada, lo cuál podría fácilmente significar que con esa se puede controlar lo que sea que es ese lugar—. Lo tengo, señorita Bennett. Lamento la demora.
