Desde entonces mis dos amigos han cuidado de mí, se han preocupado por comprarme comida y por mantenerme feliz. La verdad es que volví a vivir igual de alegre y agradecida como era con Tomas... Pero cada vez me sentía más incómoda con la compañía de los chicos, su manera de acercarse a mí, la manera en la que me expresan cuanto me quieren me derrite el corazón, aunque me guste sentir esto, prefiero dejar mis sentimientos a un lado y seguir como si nada estuviera pasando, tanto para no incomodar a los chicos, como para no incomodarme a mí.
Ahora íbamos a la universidad, así que me sentía más libre y mis amores tenían más tiempo para mí, eso me gustaba... Así no tendría que... Apuntar a alguien en mi lista y sacar de este mundo más escoria.
Miré disimuladamente en clases al par de locos que estaban en una guerra de aviones de papel en matemáticas, a penas los sorprenda la Srta. Mackenzie los podrían enviar al despacho del director y eso no es muy lindo que digamos. Aunque creo que eso no es lo que más me llamó más la atención, sino que ahora Anthony y Jack usaba lentes, o sea, vi a Jack en la graduación con lentes, pero pensé que eran de mentira.
Creé rápidamente un avión y escribí una carta avisándole a los dos que si la profe los cachaba iba a crear un verdadero problema en el que ni yo podría ayudarlos. Se lo envié a Jack que era el más cercano y justo la profesora se dio la vuelta mirándome y después a Jack.
- Señorita Lightwood – Me miro acusadoramente – Señorito Jonhson – Mierda, mierda, mierda – Por favor, vayan al despacho del director ahora mismo – Jack me miró asombrado, normalmente yo no me meto en problemas, por lo que era raro mi llamado. En cambio, Anthony se paró de su silla.
- Sra. Mackenzie – El chico parecía un poco desesperado – Yo también estaba lanzando aviones de papel en clases – Esa frase "Si cae uno, caen todos" está en todo su resplandor ante la confesión del pelirrojo.
- Sé que son sus amigos, señorito Millar – Inspeccionó al chico y al parecer no descubrió papeles ni aviones de este material cerca suyo – Así que no se tire a la borda solamente porque ellos lo hacen – Al parecer la profesora no le creyó.
Me levanté con la cabeza gacha y me fui junto con Jack al despacho del director. En el camino estuvimos hablando tranquilamente, al parecer para él no era gran cosa ir a ver al director, pero esta era mi primera vez yendo así que estaba a tope del nerviosismo.
- Dayana, cálmate – Me tomó la mano para tranquilizarme – Más allá de una bronca no pasará nada más – Apreté su mano e intenté calmarme, pero no funcionaba – Affs... - El chico me giró para ponerme enfrente de él y plantó un beso en mi frente – Tranquila... Estaré junto a ti en todo momento – Yo asentí un poco sonrojada.
- ¿Por qué usas lentes? – Pregunté para cambiar de tema.
- Siempre he usado lentes – Dice indiferente – Pero no es muy de mi agrado ponérmelos, si quiera hablar sobre ellos. Anthony también usa, pero al igual que yo, son de descanso.
- Pues... Olvidemos el tema, si es que te incomoda – Le sonreí y seguí tomada de su mano.
(...)
Cuando por fin nos encontramos con Anthony pude ver que estaba hablando con una zo... Con una chica; Era rubia, de ojos violeta y una complexión un poco moderada. Al parecer era de la misma clase que él pues se estaban intercambiando libros, pero pude ver que la chica estaba muy coqueta tomándose el cabello como tontita y subiéndose un poco la falda a lo fresita. Estás anotada en mi Death Note, perrita.
- ¿Y bien? – Pregunta Anthony cuando se acerca nosotros. Intento cambiar mi semblante de furia al que debería tener ahora. claramente se preocupa por mi cara de horror. Soy una perfecta actriz.
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Amor Psicópata~
Fiksi Remaja~Apocalipsis~ Dayana es una chica fuerte, inteligente, amable, linda... O eso es lo que quieren que creen de ella. La verdad detrás de sus acciones es un tanto perturbadora y maniática, por lo que prefiere esconderlo detrás de una máscara, todo sea...