Capítulo 7: Celos

20 3 0
                                    

Narrador: Anthony

Desde que volvimos de clases es extraño... Noah y Mathias se juntan demasiado con Dayana y casi nunca la dejan en paz, es como si tratasen coquetear, pero como no les sale, prefieren mantenerla a raya de todos los que sí puedan coquetear con ella, como si fuese un objeto demasiado valioso para caer en las manos incorrectas, aunque yo pienso igual, dudo que privarla de sus amigos sea necesario. Ni si quiera nosotros podíamos estar demasiado tiempo cerca de ella.

- Me están enojando – Espeta agriamente Jack al lado mío. Estamos en clases de Música en tiempo libre, así que cada uno está con su grupo y como se esperaba, Dayana estaba rodeado por ese par de mujeriegos.

- A mí también, Bro – Aprieto contra mi pecho la guitarra que sostengo y siento como las cuerdas empiezan a soltarse así que suavizo el agarre.

- Oh, oh... - Me giro a la dirección en la que está mirando el albino – Tenemos código rosa a las 3, código rosa a las 3 – Me susurra.

Un grupo de chicas venía hacia nosotros, claro, como Noah y Mathias no les prestan atención, las perritas vienen hacia nosotros. Pero un plan sale a la luz con todo esto.

- Déjate llevar – Le susurro igualmente. Éste me mira asqueado y un poco desconcertado – Dayana puede darles un Stop a esos tipos, pero no lo hace.

- ¿Quieres darles celos?

- ¿Por qué no? – Me muerdo el labio inferior – Ella nos está matando de celos con esos tontos.

- Buen punto... - Jack analiza toda la situación y al final cede.

Cuando llegan el grupo de chicas dejamos que se sienten y hablen cualquier cosa con nosotros, les damos la bienvenida con los brazos abiertos, igual que ella a los imbéciles de Noah y Mathias.

De vez en cuando Dayana nos echa una ojeada y eso me gusta, siento desde acá su incomodidad al ver que las chicas nos rodean así que le hago señales a Jack para pasarle el mensaje y él sonríe victorioso, hasta tiene a una de las chicas por la cintura, tan coqueto cuando se lo propone...

Dayana levanta la mano y el profesor que estaba muy atento al computador le da la palabra.

- ¿Puedo ir al baño, por favor? – Pregunta totalmente inocente.

- Claro, pero no te demores – Algunas veces enserio pienso que el profesor es muy descuidado. Los profes no deben dejar que los estudiantes salgan de las clases pues para eso nos dan un receso por cada hora, pero este profe de música es muy buena onda, así que la deja.

La chica deja el saxofón a un lado y se disculpa de sus acompañantes para irse de la sala. Aunque me extraña, Dayana es muy intachable, es la primera vez que la veo pedir ir al baño en tiempos de clase y al parecer Jack también se da cuenta de esto.

Cuando acabaron las clases de música Jack se iba a precipitar hacia el baño de mujeres ya que la castaña desde que salió no había vuelto del baño, pero yo rápidamente se lo impedí.

- Sabes lo inteligente que es esa chica – Le recuerdo con el ceño fruncido – A lo mejor es un plan para preocuparnos.

- Buen punto – El albino pareció dudar por unos segundos – Pero ¿Qué pasa si en verdad está mal?

- Pero ¿Qué podría hacerle mal? - Aseveré intentando recordar algo que estuviera mal estos últimos meses – Dayana come bien, ha dejado de vomitar y hasta hace ejercicio. Además de que acuérdate de que es casi inmortal, dudo que le pase algo... Hasta a lo mejor simplemente le llegó la menstruación – Jack parece dudar todavía, pero al final acaba dándome la razón así que seguimos dejándonos llevar por las chicas, aunque por dentro me estaba dando un tanto de incomodidad la cantidad de hormonas que sueltan todas.

Amor Psicópata~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora