« Él es el Diablo pero cuando sonríe luce igual a un Angel »
[ Libro 1 & 2 ]
Prohibida su copia o/y adaptación.
Advertencia: Esta historia contiene alto contenido sexual y lenguaje inapropiado, también escenas con un gran conteni...
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Amelia.
Todavía estoy parada fuera de la casa de las Jenner's, y no se que carajo hacer, encima mi mamá me echo de mi casa y no tengo un maldito auto y no confío en nadie ya que todos me vieron la cara de tonta todo este tiempo, pero ahora en sólo confió en mis dos verdaderos amigos; Laure y Harry.
Así que los llamo, porque ambos tienen autos.
Y seguramente no están haciendo nada.
Llamo a Harry maso menos veinte veces y ninguna me contesto, así que no me queda otra y llamo a mi amiguita que seguró ella si me atiende, porque seguramente no esté haciendo nada productivo.
En los primeros tonos no me entiende y luego me menda al buzón.
—¡Carajo! ¿Qué mierda estas haciendo ahora? ¿Porqué no me contestan el puto teléfono? —le grito al teléfono, enfadada.
La vuelvo a llamar y cuando pensé que no me contestaron, escuche su voz un poco ronca y su respiración esta acelerada.
—¡¿Quién demonios es?! —Gritó, con su vos ronca y su respiración se escuchaba agitada y acelerada.
¿Qué mierda estaba haciendo? ¿Hacendó ejercicio? Nah, ¿Follando? Ja, que gracioso.
—Soy... soy Amelia —mi voz sonó rota, se notaba que están llorando.
Luego escucho como algo se cae al piso, como si un cuerpo se había caído al piso y luego la voz preocupada de mi verdadera amiga.
—¿Ami...? ¿Nena? ¿Qué pasa? ¿Estás bien? ¿Pelearon con Jason?
La escuchar el nombre del hijo de perra, sin poder evitarlo un sollozo sale de mi garganta.
—¡No lo nombres! —suelto en un grito quebrado —. ¡Es un hijo de puta!
—Pero... ¡¿Qué paso?! ¡¿Qué hizo ahora?! —preguntó mi amiga, gritando preocupada.
—¿Podes venirme a buscar en la casa de Kylie y te cuento todo, si? —le pregunté y intente no llorar.
—Claro amiga ,ya, ya voy saliendo para allá —dice y luego escucho un gritó, diciendo: ¡¿Y me dejaras así?! ¡Con una maldita erección, Laure! ¡De verdad vas a dejarme así!
Oh Dios míos.
Esa es la voz de Shawn. Uy, lo siento muchísimo por cortarle el rollo. Ay, pobrecitos, más él... por lo de la erección.
—Laure... si, si no puedes, no te preocupes, me busco un taxi o un Uber —Digo de manera inmediata, sintiéndome estúpidamente culpable.
—No, no, no. ¡Y no! —exclamó — Ya voy saliendo para allá, ahora mismo, quedata allá... y vos.... ¡Cállate si le otra vez me dejaste cliente porque te fuiste con la puta de tu novia! ¡Así que no me veng...! —Corte.
