Luchando contra el destino ~♡ (Choi Minho)

~♡ Boda de cuero

Maratón 2/2

Narra Elizabeth: 

Frente a mis ojos apareció un gran portón negro, leí en la entrada "familia Choi". Una gran casa blanca vi al fondo, preciosa tal como la recordaba. Mi hogar, mi pequeño refugio junto a Minho.

Abrí la puerta principal, y los recuerdos llegaron a mí como una ola. Miré a mi alrededor todo estaba perfectamente impecable pero nunca había sentido la casa tan vacía, y por eso mismo me daba miedo volver, me sentía tan sola.     

Intenté hacer mi rutina como siempre: Comer, darme una ducha y ver televisión. La única diferencia ahora era que no tenía a quien esperar con la cena.

Comí con pocas ganas y como vi que ya obscurecía me fui a la habitación.

Me acosté en la cama, se sentía extraño, era más grande de lo que yo recordaba.
Levanté el cubre cama y las cobijas, y me metí debajo de las sábanas.
Me acomodé en su lado e increíblemente la almohada olía a él, a su perfume. Suspiré inundando mis pulmones de ese olor y de manera inevitable una lágrima traicionera salió de mi ojo.  

¡Cómo lo extrañaba!

...

Desperté abrazada a su almohada, su perfume de alguna manera me relajó.
Una sonrisa se formó en mis labios al leer aquel mensaje en mi celular.

Corrí a toda prisa hasta la ducha, luché con mi guardarropa por varios minutos sin saber que ponerme.

Me subí al auto a toda prisa, aún me quedaban muchas horas por delante.
Aproveché la larga cola del autopista para leer por décima vez el mensaje de mi querida suegra:

"Elizabeth cariño, hoy se realizará un concurso de canto en la unidad dónde está Minho.
Hablé personalmente con el comandante a cargo para que pudieras ir a darle una sorpresa a mi hijo, se que hoy es su aniversario y quería que pudieran verse en este día tan importante.  No te preocupes por nosotros, ya tendremos oportunidad más adelante. Por favor dale un abrazo de nuestra parte y dile que estamos orgullosos de él" 

Estaba nerviosa, lo vería otra vez luego de un año. 
Lo único que me permitieron durante este tiempo fue enviarle una carta para su cumpleaños.

No pensé que mis suegros me dejarían ir, pero dijeron que yo lo necesitaba más, y de alguna manera tenían razón.
Además hoy, era nuestro aniversario de bodas, cumpliríamos tres años casados.

Para mi suerte el tiempo era favorable. Y me embarqué con ayuda del gps con las montañas fronterizas de Seúl. Sólo me encomendé a Dios para llegar sana y salva.
Y así fue, luego de tres horas llegué al fin.

"Unidad especializada fronteriza"

Leí frente mío, y me acerqué a una cabina a mi izquierda.

-Buenos días, señorita ¿La puedo ayudar en algo?- Me preguntó el soldado.

-Buenos días, estoy buscando al comandante a cargo, estoy aquí por una sorpresa- Respondo.

-¿Me permite su documento de identidad por favor?-

-Aquí tiene- Le dije luego de buscar en mi cartera.

-¿Usted es la esposa del recluta Choi?- Me dice luego de leer

-Así es- Le respondí.

-Pase por favor, el comandante la está esperando-