>Capítulo 7: Una noche inolvidable (parte 2)<

1.5K 134 210
                                    


"— Solo una cosa más — se acerca a mi oído.

— ¿Si?

— Caíste — se separa de mí de golpe donde una fuerza me genera en la cabeza que tambalee".

Mi cuerpo rápidamente fue manchado por una masa negra que caí en cuanta que era tinta negra.

Mi cabello, mi piel y mi vestido quedaron manchados de negro. Miro hacia arriba viendo a Jessica con una cubeta y a casi todo el salón riendo a más no poder.

— ¿Qué es esto? — Ethan se acerca a mi donde por instinto me levante.

— ¿Qué acaso no lo entiendes estúpida? — se acerca a mi donde yo rápidamente retrocedí —. Nadie te quiere en este lugar, nadie te quiere por ser solo un fenómeno.

— Siempre fingí ser tu amigo, me hartabas todos los días pero si  quería que este día fuera perfecto tenía que sacrificarme

Mis ojos se llenaron de lágrimas.

— ¡Solo eres un estorbo! — este me empuja nuevamente cayendo al suelo manchándome más de tinta de lo que ya estaba.

— Te recomiendo que te laves rápido que la tinta es difícil de quitar — menciona esta.

Jessica baja del puente para acercarse a Ethan y besarse enfrente de mi.

— Solo muérete de una buena vez — todos se alejan riéndose dejándome tirada en el pasto.

Cerré fuerte mis ojos para levantarme y salir corriendo hasta el final del salón donde no dude en salir por los arbustos y correr hacia el bosque.

¿Porque me pasaba esto a mi? No había hecho nada malo... corrí lo más que podían mis piernas con los tacones que aunque fueran chicos dificultaban la tarea. Ya alejado de todo volteo hacia atrás sintiendo como la tinta comenzaban a secarse.

Mis ojos se llenaron de lágrimas recargándome en el tronco del árbol para caer hasta el piso abrazando mis piernas rompiendo en llanto.

— Te encontré — levante mi vista viendo a Bendy quien me veía serio.

— ¿Qué estas haciendo aquí? — dije cortante tapando mi rostro con mis manos evitando que me viera llorar.

— Después de ver aquella broma tan pesada que te hicieron — le corte.

— ¿Lo viste?

— Cada segundo — bufe para quitar mis manos y dejar que esté me viera para que empecé a hacer sus comentarios de mal gusto.

— Dilo de una buena vez al fin y al cabo esto no puede empeorar más — este se hinca enfrente de mi para levantar mi barbilla haciendo una mueca.

— Lo único que nunca le voy a perdonar es que te haya puesto un dedo encima — lo mire medió asombrada para acomodar mis cabellos sueltos sonriendo —. Pero aún así te lo dije maldita idiota.

Ahí está el demonio que conozco.

Me senté en el sucio suelo cayendo en la realidad de que mi vestido que mi padre tardó en comprarme se había estropeado.

— Papá... — agarre un parte de mi vestido escuchando como se "rompía" por la tinta seca —. Está arruinado.

— No pienses en eso más — este me toma la mano donde de un jalón me levanta —. La noche aún es joven así que vamos a aprovecharla.

Este levanta su mano hacia mi vestido para sentir como la tinta de mi piel y mi cabello se iba para hacerse una masa de tinta. Baje mi mirada hacia mi vestido como la tinta que estaba impregnada en él se movía creando un hermoso patrón en ella.

Una oportunidad para amarla Donde viven las historias. Descúbrelo ahora