Capítulo 7: El equipo de Quidditch

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Los días pasaron y las cosas iban mejorando de poco a poco, al menos mis compañeros de Griffyndor me trataban más normal, sin tanta formalidad, había unos que sí parecían querer besarme los pies, pero prefería ignorarlos y solo sonreírles con cortesía, uno de ellos era Percy Weasley, pero Ron y Ginny se encargaban de molestarlo, y la segundo lo imitaba haciendo que me riera. Los de otras casas, aun me hacían reverencia o se quedaban sin saber qué hacer, eran muy pocos los que me trataban como si nada. Eran más los alumnos que compartíamos la clase del profesor Lupin, dado que eran pocos y teníamos más interacción que en otras materias.

Mis clases favoritas eran Defensas contra las artes oscuras, me encantaba como daba la clase y era un profesor del todo practico, nos decía que el saber defendernos era mejor con practica que con libros, además a veces llevaba algunas creaturas extraordinarias y nos explicaba que hacer al encontrarlas. Otra clase que me encantaba era encantamientos, el profesor Flitwick era un hombre muy bajito y con orejas puntiagudas, era risueño y aunque al principio me trato con demasiada emoción, ahora parecía calmado, tratándome como a todos mis compañeros. Trasformación era muy buena, la profesora McGonagall muy estricta y aunque era la jefa de nuestra casa, parecía que no favorecía a nadie, pero aun así no dudaba en escuchar o ayudar algún alumno.

Mis peores clases... realmente no sabía si era entre pociones o historia de la magia, en la segunda me quedaba dormido, no podía prestar atención, porque el profesor Binns era demasiado aburrido y su voz monótona y lenta parecía arrullar al más atento de todos, incluso a Hermione quien había demostrado ser una de las mejores estudiantes la había cachado cabecear en su clase un par de veces.

--- No entiendo, solo habla de los reyes y guerras --- dijo Ron rodeando los ojos --- ¿de qué nos sirve eso?

--- A ti no, pero a Harry sí --- me dijo Hermione mirándome mal, porque le estaba copiando el ensayo de esa materia --- es bueno que conozca todo sobre su pasado, sobre los reyes y príncipes que lo antecedieron.

Rodee los ojos, porque odiaba eso, no quería saber sobre cuantos Potter habían estado en los tronos y cuántos de ellos habían sido los mejores o los peores. Solo algunos datos se me hacía importante, como en el que decían que el segundo rey antes de mi padre (mi bisabuelo), el rey Fleamont había declarado por primera vez la ley de igualdad entre hijos de muggel, mestizos y sangres limpia, debido a que anteriormente los alumnos hijos de muggel o sangre "manchada" eran considerado inferiores y tenían que servir a los verdaderos magos. Está ley fue en colaboración con el profesor Dumbledore que en ese año había por fin tomado el titulo como director de Hogwarts.

Y con referente a la clase de pociones... bueno realmente Severus no me decía nada o criticaba y siempre mis pociones tenían notas medianamente decentes, aunque siempre lograba la forma de regañarme en privado, porque decía que, como príncipe y futuro rey, debía tener las mejores notas en todo el colegio. Lo que no me gustaba de él, era como trataba a mis otros compañeros, traía de carrilla a Neville, criticándole todo, desde como movía la varita y hasta como elaboraba cada cosa, en más de una vez le desapareció la poción y le dio cero, enfrente de todos. Mi amigo parecía demasiado avergonzado. Además, siempre lograba quitarnos, aunque fuera cinco puntos a nuestra casa por día, al menos a nuestro grupo, no sabía si con los demás era así. Lo peor era que no podía reprochárselo, porque había dejado muy en claro, que una cosa eran las clases y mi estadía en Hogwarts, mientras otra muy diferente las vacaciones.

Por último, quedaba la clase de Astronomía, pero no veía nada en las estrellas, no era de las peores clases porque la profesora Sinistra la llevaba calmada y se paraba para regresar el tema cuando alguien parecía dudoso, lo cual no la hacía avanzar demasiado desde su primera clase.

1 Harry Potter: El último herederoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora