1 Harry Potter: El último heredero

Capítulo 11: Clases de Protocolo

Nos sentamos todos en una gran mesa que había ahí mismo, mientras las dos cocineras, con magia traían todos los platillos y ponían la mesa con mucha práctica, debían estar acostumbradas hacer todo ello.

--- Ahora díganme, ¿Cómo les va en Hogwarts? --- pregunto mi padre sirviéndose un poco de papas cocidas y algunas salchichas.

--- Muy bien, las clases son asombrosas, --- dijo Hermione con entusiasmo --- me encanta la clase de encantamientos, aunque Defensas Contra las Artes Oscuras es asombrosa.

--- Sí, más si las da un fanático estudioso --- dijo papá riéndose, todos los vimos --- están en la clase de Remus, él me lo dijo hace unos meses... que por primera vez tenía más de cuatro alumnos, que son los que con frecuencia tienen.

--- Deberían elegir todos a Remus, ¿Quién es el idiota que ahora da clases en conjunto? --- pregunto Galadriell mordiéndole a su pan tostado.

--- Se llama Quirrell --- le platique --- no lo conozco realmente, ni como da su clase. Pero todas están repletas de estudiantes, algunos alumnos se han quejado por la poca atención.

--- Bueno, si dejaran de tomarla con cada profesor diferente y se dedicaran a tomarla con el que sí a perdurado, estoy segura de que no se quejarían --- dijo Galadriell rodeando los ojos, todos la miramos --- ¿Qué no saben la maldición de esa clase?

--- Gala, esas son tonterías --- le dijo mi padre riéndose, pero todos queríamos saber --- desde hace varios años, cuando yo estaba más o menos en segundo, se dice que hay una maldición que hacen que los profesores de Defensas Contra las Artes oscuras renuncien o les pasen algo extraño... no duran más de tres años algunos.

---- Sí dicen que es una maldición, ¿Cómo es que el profesor Lupin a durado? --- pregunto Hermione, papá sonrió orgulloso.

---- Creo que sirve tener contactos en la realeza --- dijo mientras se frotaba la barbilla --- y que Galadriell fuera a golpearlo, solo porque pensó en dejar el puesto... eso asusta mucho.

--- ¿Qué asusta? --- pregunto un hombre llegando a la mesa y sonriéndonos, era alto, de cabello rizado y negro, unos ojos grises, además de mirada picara. Creo yo que lo había visto en alguna parte --- ah, hola Harry-

--- ¿Hola? --- le dije dudoso.

--- Ahora díganme, ¿Qué es lo que asusta mucho? --- pregunto sentándose a lado de Galadriell y tomando comida.

--- Ella enojada y golpeando a todo el que se le ponga encima --- le dijo mi padre divertido, mientras señalaba a Galadriell

--- Ah sí, eso es muy aterrador --- dijo con la boca llena y estremeciéndose, Galadriell le dio un golpe en la nuca --- ¡deja de maltratarme!

--- Deja de hablar con la boca abierta y compórtate Sirius --- le dijo resoplando.

¡Claro!, él debía ser Sirius Black, el que había visto en la foto de la oficina del profesor Lupin, el otro gran amigo de mi padre, además mamá también lo había mencionado esa ves en la casa.

Mire la escena divertido, porque ambos Galadriell y Sirius discutían sobre los hábitos alimenticios del segundo, hasta que él le dio a ella una rebanara de pan con mermelada, ella sonrió para darle un beso en la mejilla. Entonces comprendí, que Galadriell Black, era la esposa de Sirius Black, recordando que el profesor Lupin también me había dicho que ambos discutían demasiado.

--- Hablando de fanáticos de Quidditch --- llamo la atención de todos Galadriell --- tenemos aquí a tres, ansiosos por ver la famosa cancha.

--- Te dije que era la mejor inversión que podríamos hacer ---- dijo Sirius orgulloso, mi padre asintió de acuerdo con él --- ¿Qué dicen chicos?, mañana un partido, al menos que su majestad tenga algún compromiso soso y aburrido --- miro a mi padre quien entrecerró los ojos molesto --- ¿y bien?