¿Se nos acabó la suerte? (suerte #4)

24|Todo lo que quieras...

Hola addictoners!!! Hoy tenemos maratón con los últimos caps de la historia.

Los siguientes tres caps (contando este) seran sobre las otras tres parejas de la pandilla, un cap por cada pareja. Será como cerrar el círculo o al menos así lo siento yo y los dos últimos caps serán para Billy y Jason y por supuesto, para la boda 😉.

Empecemos el maratón con la pareja Daemax.
¡Que lo disfruten!

Cap (1/5)

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Max se llevó el sandwich a la boca mientras mantenía los ojos fijos en el libro sobre la mesa. Se encontraba sentado en una de las muchas bancas con las que contaba el patio central del campus. Le gustaba sentarse ahí y estudiar en silencio. Solía ensimismarse mucho en sus lecturas por eso no fue consciente de las dos personas que se sentaron en la mesa junto a él.

—Ya déjalo— dijo una de las dos personas. Era un chico delgado de tez morena y cabello ligeramente ondulado. —No te pondra atención, siempre es así cuando esta estudiando.

—Lo sé, solo es gracioso molestarlo y que ni siquiera se de cuenta —dijo una chica de cabello claro y ojos de un tono grisáceo.

Entonces Max levantó la cabeza y parpadeó al ver a sus acompañantes. Una linda sonrisa se apoderó de su rostro.

—Hola chicos ¿acaban de llegar?— preguntó inocente.

Los jóvenes compartieron una sonrisa complice y una pequeña risa.

—Si— mintió la chica pues llevaban alrededor de cinco minutos llamando su atención — Zed y yo veníamos a decirte que el profesor Dolohov te estaba buscando.

—Exacto, le dije a Tamy que te enviara un mensaje— dijo Zed señalando a la chica a su lado— Pero ella se empeñaba en verte. Ya sabes que esta enamorada de ti y tiene que verte al menos unas cien veces al día —bromeó.

La chica rodó los ojos codeando el costado de su amigo. Aunque algo de cierto había en las palabras de Zed. Tamy Reiner era un linda chica, muy amable y dulce y si, había tenido un flechazo con Max al nada más conocerlo. Sin embargo deshecho sus sentimientos al enterarse que el dulce chico de ojos azules tenía novio y para que negarlo, le encantaba la pareja que Max y Daemon hacian, eran tan calientes juntos... Pero de igual manera no estaba prohibido admirar la belleza de Max ¿cierto?

—No le hagas caso a Zed, solo esta celoso de que no este babeando por él.

—¿Disculpa? Ni siquiera me interesas de esa manera. Dios me libre de querer salir con una neurótica obsesiva como tú —El chico desvió la vista luciendo indignado.

—¿Lo ves?— Tamy se inclinó sobre la mesa como si fuera a contarle un secreto a Max. —totalmente enamorado.

Max soltó una risa. Siempre era divertido estar alrededor de Tamy y Zed. Ellos ni siquiera lo sabían pero cada vez que peleaban lucian como  un viejo matrimonio.

—Deja de escuchar la loca de Tamy y mejor ve a buscar al profesor Dolohov porque parecía que le urgía verte.

—Esta bien —Max trataba de contener la risa— Gracias por avisarme chicos, los veo luego.