-Juguemos un juego: El que se enamora pierde. Pues, pierdes si te olvidas que es un juego y empiezas a amar de verdad.
-Creó que éste será el primer juego que perderás.
♡♡♡
▷ Historia totalmente mía.
▷ No copias, ni repr...
No podía decir nada, estaba demasiado sorprendida e incluso palideci, no podía creer que él estaba frente a mí, los años parecían no haber transcurrido porque el lucía igual a como lo vi por última vez.
– Señor, lo siento. – Jaemin hizo una reverencia sonriendo con dulzura, parecía no entender porque Jihoon y yo nos mirábamos el uno al otro de esa forma.
La mirada de él pasó de mí a nuestro hijo, parecía mirarlo con atención y luego se puso de cuclillas. Entonces Jaemin lo miró de cerca y esbozó una sonrisa más enorme aún.
– Ya veo porque mamá decía que me parecía a alguien. – Comentó él acariciando el rostro de Jihoon y yo sólo pude mirarlos a ambos, era el momento con el que siempre había soñado y ahora estaba justo frente a mí.
– Jaemin, vámonos. – Ordené tomándolo de la mano pero él no parecía querer irse. – Cariño, ya.
– ¿Qué edad tienes? – Le preguntó Jihoon acariciando su cabello aumentando más mi nerviosismo.
– Tengo seis años, señor. – Respondió él sin dejar de sonreír, parecía que se sentía muy a gusto con él y el remordimiento empezaba a hacerme sentir mal.
– Seis años... – Susurró Jihoon mirándome fijamente. – Seis años en los que no te he visto, ____.
– ¿Usted conoce a mi mamá? – Jaemin parecía muy interesado en saber más y yo no comprendía como podía ser tan listo, de pronto pensé en el día en que tuviera que decirle que el hombre frente a él era su padre y la mano me tembló.
– La verdad es que, tu mamá y yo... – Decía hasta que Seunghun llegó hasta nosotros.
– ¡Papá! – Exclamó mi hijo corriendo hacia él y sentí como el corazón se me oprimía. – Eres mi héroe.
– ¿Papá? – Jihoon estaba confundido y me miraba en busca de alguna explicación.
– Eres mi héroe. – Le dijo Jaemin a quien creía su padre y la expresión de Seunghun cambió, porque probablemente no se sentía como un 'héroe'.
– Jihoon... Yo... – Intenté explicarle pero el salió rápidamente y aunque Jaemin quiso ir tras él Seunghun no lo bajó de sus brazos, entonces empezó a llorar.
– Ese señor me agradaba, mamá. – Me dijo sollozando y lo cargué en mis brazos, no pude evitar mirar mal a Seunghun.
Quise decirle que no tenía porque cuestionar las decisiones de Jaemin o ordenar sobre él pero yo había actuado mal con mi propio hijo al no decirle la verdad.
– Te amo, tesoro. – Le susurré a mi hijo y éste me abrazo con mucha fuerza, la que necesitaba porque me sentía a punto de caer.
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