Narra Chris:
Ese es mi típico guión. La de hacerme pasar vergüenza a mi mismo, y la razón no sabría decirlo con exactitud; pero la cosa para mi siempre han sido de esta manera.
Me mudé junto a mi padre a este pequeño pueblo para poder ayudarlo, ya que el ingreso económico no a sido bueno para nosotros desde que mi mamá falleció. No sabría decirles cual fue el motivo de su deceso, solo fue así, la encontré junto a mi padre tendida en la habitación, y eso. Nada más que eso. Ella era una gran escritora, tenia una grande imaginación, le gustaba anotar en un cuaderno cada cosa pequeña pero bonita que le había sucedido en el día. Siempre me decía que los libros y los acontecimientos de tales son reales, pero las personas tienen una mascara de incredulidad que le imposibilita de mirar el maravilloso mundo con sus secretos más asombrosos. Todos querían comprar sus libros, ella aún no era una persona famosa que digamos, pero cautivaba a esa poca gente que conocía de su trabajo.
Mi papá en cambio trabaja como gerente en una aserradero, le ofrecieron buen empleo aquí y era obvio que no lo desaprovecharía. Después que mamá nos dejo él quedo más frío y callado, solo intercambia unas cuantas palabras conmigo, para romper un poco el hielo.
Y yo... Bueno me dedico a registrar en mi agenda cosas que suceden en la naturaleza no sé por qué pero me gusta, a veces pienso que lo herede de mi madre. Tuve mi pequeño evento particular esta mañana en la preparatoria, era nuevo y fui atacado por unos gorilas por no querer hacer el trabajo que le correspondía a ellos, no soy bueno peleando, no me gusta la violencia. Aun que en medio de las patadas y ofensas que me decían esos abusivos sin ninguna razón, ella los detuvo. Era como de esas chicas frías y sin muchas palabras en la boca. Sus ojos eran oscuros tendiendo al color negro, su piel era blanca pálida, su cabello era un negro bastante intenso, y en sus labios solo había un toque de color. Era diferente a las demás, era como que tenia algo que leí en algún libro...
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Luna Menguante//Christopher Vélez
Novela JuvenilLa vida y la muerte se encontraron, se enamoraron sin poder prever. Entonces la vida dio flores a la muerte para que no lo olvidara en su infinita trayectoria. Eso fue demasiado para la inmortalidad que los contemplaba, desde ese entonces se encarg...