Zabdiel mueve a Chris despacio mientras intenta despertarlo.
-Bebé, llegamos-. Escucha a Chris hacer un pequeño pujido y ríe.- Vamos, bonito, hay que bajar-.
Veléz se levanta un poco desorientado y mira a su alrededor viendo como los demás terminan de guardar sus cosas para bajar del avión.
-¿Llegamos?-. Pregunta tallando sus ojos.
-Desde hace quince minutos bebé, el tiempo que llevo intentando despertarte-. Responde sonriendo.
-Es que estás muy cómodo, príncipe-. Hace un pequeño puchero y Zabdiel mira hacia los lados, para asegurarse que nadie los está viendo, y deja un beso sobre sus labios.
-Bajemos ya, bonito-.
Ambos toman sus cosas y comienzan a ordenarlas para bajar del avión.
Los chicos ya tienen todo y solos los esperan a ellos abajo.
Erick se adelanta y jala a Chris tomando algunos videos mientras esperan sus maletas.
Observa de reojo como Joel los mira con recelo y ríe, porqué sabe que está enamorado de Erick pero nunca lo va a admitir.
-Si las miradas mataran, mi bebé ya no estaría conmigo y te odiaría porque sería tu culpa-. Dice luego de llegar con Joel y lo toma del hombro apretándolo amistosamente.
-¿A caso tú no estás celoso?-.
-¿Por qué debería?-. Zabdiel responde y no lo dice con la intención de mencionar que solo es un amigo de Chris ante ellos, si no que realmente acepta que Erick siempre será solo su mejor amigo.
Joel tarda en entenderlo, pero como si leyera su mente, asiente.
Mira como una chica rubia se le queda mirando a Christopher y sus celos no tardan en hacerse presentes.
-¡Vamos, bonito! Se hace tarde, bebé-. Grita dirigiéndose a Chris y este asiente con sus mejillas sonrojadas.
Observa como la chica deja de mirarlo y sonríe triunfante, porque no iba a dejar que vieran a su niño de ese modo.
Solo él podía.