DANGEROUS | EDITANDO |

Capítulo quince.

Observaba a través de la ventana la noche sobre nosotros, dentro del auto el silencio era tan incomodo que casi podía cortarse con un cuchillo. Mire a Mac que conducía junto a mí, al sentir mi mirada se tensaba al instante y sostenía tan fuerte el volante que sus nudillos se tornaban blancos. Habían tantas cosas que quería preguntar que no sabía por donde iniciar, quería aclarar todo lo que mi mente pensaba pero cuando abrí mi boca Mac me gano y hablo primero.

- Se que tienes muchas preguntas – Dijo aun con su vista en la carretera – Pero será mejor esperar a que lleguemos.

Parecía muy lógico, pero yo no quería esperar, estaba arto de hacerlo y la verdad es que la frustración estaba cada vez más dentro de mí. Quise protestar pero supuse que de nada me serviría, ella tenia razón así que lo mejor que podía hacer ahora era guardar silencio y morder mi lengua.

Luego de un largo viaje Mac aparco en el estacionamiento de un Motel a las afueras de la ciudad. Bajamos del auto y al cerrar la puerta tras de mí mire mi alrededor con una mueca de asco, no me gustaban los moteles y este mucho menos.

- Tardaran en encontrarnos aquí – Hablo detrás de mi Mac – así que mueve tu trasero.

Entramos a una recepción apenas iluminada, detrás de un escritorio enorme se encontraba un gordo entretenido con la televisión mientras devoraba una hamburguesa con tanto gusto que me dio asco.

- Disculpe… Una habitación – Dijo Mac.

El hombre despego sus ojos de la pantalla y miro a Mac, su pequeña figura se mantenía muy baja a comparación del enorme escritorio que estaba frente a ella. El gordo le sonrió divertido, tenía restos de salsa salpicados en la camisa y un poco en la comisura del labio. Fruncí el ceño y me acerque a Mac rodeándola protectoramente con mi brazo sobre el hombro, sentí su cuerpo tensarse junto a mí pero no le di importancia y mire ceñudo al gordo que borraba su sonrisa y nos entregaba las llaves del 7.

Aun con mi brazo sobre su hombro subimos las escaleras y una vez que estuvimos dentro cerré la puerta detrás de mí impaciente por que comenzara a explicarme todo de una vez por todas. Mientras Mac observaba el lugar yo también lo hice, una pequeña habitación con una puerta que sería el baño, una cama donde cómodamente cambian dos y una mesa de noche con una lámpara que alumbraba débilmente el lugar.

Mac se quito la chaqueta de jean y la dejo en la cama abriendo la ventana y dejando entrar una fresca brisa de afuera. Mis nervios me comían vivo, no entendía porque le daba tantas largas, yo solo deseaba que hablara de una maldita vez.

- ¿Y bien? – Pregunte insistente, cruzándome de brazos.

Mac suspiro y se sentó en la cama.

- ¿Qué quieres saber?

- Todo – respondí firme.

- De acuerdo – asintió – Mi padre es un mafioso, trabaja con drogas y  mi hermano y yo hemos recorrido el mundo prácticamente huyendo de los peligros del trabajo de mi papá. Antes de que mi mamá muriera todo era mas simple, pero al ella enfermarse mi padre no quiso que nos ocurriera nada así que nos mantuvo en constante movimiento. Hemos ido a Roma, España, Argentina, New York, Miami, y muchos otros lugares, y ahora estamos aquí en Londres. Al llegar Nick, ya lo conoces, me entrego mi nueva identidad, siempre la cambiaba debido a que era mas seguro y me convertí en Mackenzie Morgan.

- ¿Qué hay del secuestro? – Pregunte.

- Fue real, por si lo dudabas. No sé como lograron dar conmigo, es un gran enemigo de mi padre que solo quiere que perjudicarlo y yo siempre he sido su punto débil. Cuando tu te fuiste ¿recuerdas al niño que ayudaste a obtener un premio? – Asentí – Bien, engañaron al niño para que fuera por mi para que “supuestamente lo ayudara” con su peluche pero era una trampa para alejarme de todas las personas y ahí fue cuando me raptaron, cuando desperté estaba en una bodega sucia, tenía miedo Tristan, pensé que me matarían pero luego llegaron los hombres de mi papá y yo escuche disparos y todo fue un caos y me desmaye para luego despertar junto a mi hermano. El me conto que tu estabas en el edificio, mi padre al saber que eras mi novio o bueno... que éramos algo se puso como loco y le ordeno a Nick que te trajera pero sin darte demasiada participación.