Cruel (KrisTao)

07

— ¿Qué planea Zhoumi contigo? —Cuestionó Jongdae como por décima vez, el chico simplemente se dedicaba a ignorarlos, importándole poco tener una pistola apuntando a su cabeza.

— No es tu asunto —rugió, entrecerrando sus ojos hacia Kris— Si vas a disparar, hazlo ya. No pierdas mas tú tiempo ni me hagas perder el mío.

— No creo que necesites tiempo si dispara.

— Entonces que lo haga. —Se encogió de hombros y empujó su cabeza hacia el cañón de la pistola, provocando una risa de Jongin.

— Mierda, niño. Coopera un poco. —Jongdae le arrebató el arma a Kris y suspiró.

— No hablaré.

Les sonrió y se recargó en la cabecera de la cama, mirándolos sin importancia.

El rostro del chico se endureció y su mirada cambió drásticamente.

— Lo has hecho enojar —alardeó Jongin con alegría, riendo un poco, cuando Tao lo miró su sonrisa creció— Ahora conocerás a Chen.

El nombrado se acercó a zancadas y lo tomó con fuerza por la mandíbula.

— He tenido más paciencia de la que debería, maldito. —El agarre se apretó y el chico gimió de dolor— No me hagas ir sobre tu novio.

Los ojos de Tao se abrieron demasiado y tiró de la cadena, tratando de liberarse.

— Se llama Sehun, ¿No?

— ¡¡No te metas con el, bastardo!! —Su gritó hizo reír al moreno, Jongdae simplemente chasqueó la lengua.

— Si no hablas, lo traeré aquí y lo mataré frente a ti. Lo haré sufrir tanto, que me suplicará que acabe con él y te mantendré aquí, junto a su cadáver hasta que comience a apestar. ¡¡Así que hablas o te esperan los peores días de tu puta vida!! —Lo soltó de manera brusca, provocando que cayera contra la cama.

Tao sintió su corazón martillear contra su pecho con tal fuerza que comenzó a doler, su respiración se volvió errática y sin poder evitarlo, sus ojos se llenaron de lágrimas, pero se negaba a dejarlas salir, no quería mostrar debilidad ante ellos, pero Sehun era su debilidad.

« Por favor, no lo dañes » Quiso decirles, pero sus labios se mantuvieron cerrados « Te lo diré todo, no te acerques a él, jamás » Una gota salada se escapó de su ojo y bajó por su mejilla con rapidez, perdiéndose a los segundos en su barbilla.

Tensó la mandíbula y aclaró la garganta— Mátalo si quieres. No hablaré. —Su corazón se estrujó al decir eso, se mordió la lengua cuando miró al chico frente a él sonreír.

— Jongin, manda a uno de los chicos por ese tipo —la orden fue clara, el moreno rió un poco y asintió con la cabeza, para comenzar a caminar hacia la puerta.

— Iré por él personalmente. —El menor pudo notar la burla en la voz del moreno y la desesperación se apoderó de él.

« Déjalo » 

« No te le acerques »

« No lo dañes »

« Es todo lo que tengo »

— ¡No te le acerques! —Rugió con enojo, sus muñecas tronaron al tirar de sus manos con fuerza, las esposas se adirieron a su piel, abriéndola lentamente, la sangre comenzó a salir.

— ¿Hablaras? 

Asintió con lentitud, cerrando sus ojos, apretándolos— Lo haré... Sólo déjalo.