"Semental"

Parte 23: Encuentros

23-Encuentros

**Renji**

-"Las noticias sobre los experimentos del ejército nipón siguen siendo un escándalo en la cumbre de todos los países orientales y occidentales. El embajador de Estados Unidos y Alemania, ha comparado estas atrocidades con las cometidas por los nazis en la Segunda Guerra Mundial. Aún no se sabe el paradero de alguno de los hombres que participaron en estos crímenes, como el científico Kurotsuchi Mayuri, hijo del principal acusado por este crimen, que sigue siendo buscado por la policía japonesa en colaboración con la americana. Los hombres más influyentes de los negocios nipones, ya han sido llevados ante la justicia por encubrir este asunto, mientras que los hombres afectados, están en paraderos anónimos para conservar su intimidad. Esta noticia la seguiremos tratando en el informativo especial de madrugada, en el canal..."-

Apago la radio al mismo tiempo que doy una calada al cigarro de entre mis labios apoyando mi cabeza en la pared. Estoy harto de escuchar la misma noticia un mes tras otro, todos los días, en todos los canales de televisión y emisoras de radio. Cada vez que oigo el apellido "Kuchiki" se me revuelven las tripas y tengo que hacer acopio de todo mi auto-control para no rememorar las pesadillas que tengo cada noche recordando su rostro, sus ojos y su cuerpo sobre el mío unidos carnalmente. Joder...no puedo olvidarlo....a veces siento que sigo esclavizado a ese hombre, aunque luego despierte y me vea en mi pequeño apartamento, el piso que él me regaló...tsk....así es imposible no acordarse, encima el tatuaje con su nombre en mi muslo....es más que una señal evidente del pasado que compartimos. He intentado ir a algún centro estético para quitármelo con láser, pero no me he atrevido, además, que todos sabrían que yo soy uno de los sementales. Aunque ahora seamos hombres libres, todo el mundo podría reconocernos por estos tatuajes aunque los altos cargos hayan hecho todo lo posible para ocultar nuestra identidad. Yo estoy protegido por la embajada y altos cargos públicos, como otros sementales japoneses, mientras que hombres como Zangetsu o Grimmjow Jaegerjaques, están bajo la custodia de los altos cargos de Inglaterra y España. Mientras, ellos....los hombres que han jugado con nosotros todo este tiempo....bueno...no sé qué decir...

Estrujo el cigarrillo ya gastado contra el cenicero y me visto para irme a la Universidad. He decidido estudiar medicina para estudiar más mi genética y por ahora no me va mal aunque lleve poco tiempo en el primer curso. También trabajo de camarero en un restaurante y de empleado en una fábrica de juguetes. Gano el suficiente dinero para mantenerme e incluso tengo tiempo para ir al gimnasio y salir a beber con los amigos que he hecho. No puedo quejarme.

Rukia y yo seguimos siendo amigos, pero las cosas no son como antes. Hemos intentando ser pareja, pero ya no siento por ella lo mismo que antes y eso me daba rabia al principio, pero Rukia lo ha entendido. Casi nunca me habla de su familia, aunque está más delgada y pálida desde que este escándalo les ha afectado. Siempre hay alguno que se mete con ella en la universidad o incluso llaman nazis a la familia Kuchiki, como a otras que nos tuvieron dominados. Su padre, Kuchiki Soujun, fue enviado a prisión al igual que otros ricos, como Ukitake Jushiro, Ishida Ryuken y Urahara Kisuke. Los hijos de estas familias no han ido a prisión porque los patriarcas asumen toda la responsabilidad, pero han perdido sus negocios y mansiones. Rukia vive en el internado de la universidad que se lo está costeando precisamente el hombre de mis sueños, Byakuya. Aunque no me ha dicho de dónde saca el dinero, porque les han congelado las cuentas bancarias. El único de los Kuchiki que ha podido escapar ha sido Haruka junto a Kenpachi, que ahora viven al sur de Japón manteniendo el anonimato.

Al terminar las clases en la facultad, decido ir a casa de los Kuchiki, ya que Rukia me ha pedido con mucha vergüenza que si puedo ir a verles para ver como están. Sen y Byakuya viven en la única casa que les han dejado a los Kuchiki, aunque solo es un pequeño dojo destartalado a unos kilómetros de lo que era la mansión Kuchiki y ahora pertenece a un político. Al parecer también viven con ellos su abuelo, Kuchiki Ginrei e Ishida Souken, que fueron absueltos de estar en prisión por su avanzada edad, de ahí que Soujun y Ryuken estén tomando su lugar en el encierro.