Parte 6

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Jeon JungKook 

JungKook abrió los ojos y se sintió extraño. Otra vez había soñado con un hermoso hombre de cabellos largos y rubios. Su piel era tan perfecta su sonrisa, tierna y delicada.

Resultaba raro, ya que casi nunca recordaba que soñaba y desde hacía unos meses se encontraba soñando, con un hermoso hombre en un lugar extraño, un claro de agua en medio de vegetación.

La primera vez, el bello hombre rubio de ropas antiguas, lo observaba y reía mientras salpicaba agua, divertido.

Luego lo vio sentando en una piedra al centro del claro, mirándolo y sonriendo, de una forma tan hermosa que se sintió enamorado.

Esta vez había sido más extraño aun. El hermoso chico, se encontraba desnudo sobre la cama, en una habitación blanca y espaciosa, podía verlo claramente, su perfecta piel blanca, iluminada por la luz del día, sus hermosos ojos castaños que centellaban entre traviesos y llenos de deseo. El chico era una imagen angelical. Majestuosa, tan irreal.

JungKook se levanto y se dirigió al baño para darse una ducha antes de ir a trabajar. Hoy sería un día agotador. Tenía la agenda completa y dos nuevos pacientes. Siempre los nuevos eran los más complicados.

JungKook era fisioterapeuta y su reputación era tan buena, que era muy difícil conseguir una cita con él. El castaño había tenido una excelente educación en Europa y se perfecciono en Asia. Siempre fue una de esas personas que toma su profesión enserio y siempre trato de superarse. El dinero nunca fue un problema para JungKook, su familia poseía una de las más grande corporaciones industriales de europea, se especializaban en la urbanización de pueblos y explotación comercial de los mismos. Tenían la receta para hacer que cualquier zona rural se convierta en una costosa población comercial y la vendían por inmensas sumas de dinero. JungKook nunca tuvo intenciones de ocupar algún cargo dentro de la empresa familiar. Pero su padre no dejaba de insistir en que sería su predecesor en el sillón presidencial de la inmensa corporación. JungKook no discutía, él sabía que no lo haría. JungKook amaba lo que hacía, pero de cuestiones empresariales no tenía idea, ni tampoco le interesaba saber.

Una vez alistado con su atuendo de ambo color celeste como solía usar. Se coloco su campera de cuero y su casco negro y subió a su hermosa Ducati negra, su único y gran amor.

Atravesó la avenida a toda velocidad y llego al hermoso edificio donde se ubicaba la clínica. Bajo al estacionamiento y ubico su vehículo en su lugar asignado. Subió las escaleras hacia el piso donde estaba su consultorio.

- Hola Susy ¿ya llego mi paciente?- dijo JungKook una vez atravesó la puerta y se topo con la hermosa castaña que le sonreía desde el recibidor.

- Buenos días Sr. Jeon, lo está esperando en la sala.- Susy bajo la voz cuando se acerco a tomar el expediente- el hombre parece importante, vino con dos guardaespaldas.

- Gracias Susy- dijo e ingreso divertido por la situación ya común de Susy cada vez que venía alguna celebridad o deportista conocido. Susy solía ser muy cholula, pero no le extrañaba ya que sus clientes, mantenían ese perfil.

El castaño avanzo mirando aun el expediente, parecí algo sencillo, un viejo esguince que no había sido sanado correctamente y ahora estaba molestando.

- Buenos días- dijo JungKook y volteo la hoja para ver el nombre del paciente.- Sr. Kim Taehyung- el hombre vestía con un finísimo y llamativo atuendo, que podría jurar había visto en alguna tienda de GUCCI.- pase por favor.

JungKook empujo la puerta con una mano mientras extendía la otra al excéntrico hombre frente a él.

- Buenos días Sr. Jeon, es bueno por fin concertar una cita con usted.- sonrió el rubio mostrando unos granes y hermosos dientes blancos.

Avanzaron al escritorio solo ellos, ya que el par de hombres vestidos de negros había permanecido en la sala.

- Por favor Sr. Kim tome asiento.- dijo el castaño y señalo el sillón marrón.- por lo que veo es una vieja lesión que no ha tenido tratamiento. La radiografía que me trae muestra que si bien ha habida una sanación de tejidos, la forma en que lo ha hecho ha sido incorrecta. Deberíamos trabajar el estiramiento y la rotación para que los cartílagos se adapten y los músculos vuelvan a su lugar. Igualmente me gustaría echar un vistazo si me lo permite.

- Como usted diga Sr. Jeon, usted es el experto.- JungKook se levanto y Taehyung lo siguió.

- Muy bien, vamos a quitar los zapatos, trate de bajar su cintura estirando sus manos para tocar la puntas de sus pies- Taehyung siguió las instrucciones.- JungKook se acerco por detrás y presiono los músculos de la cadera. El rubio se ruborizo por la imaginación descarada que poseía y lo atractivo que le resultaba el castaño vestido de ambo detrás de él.- muy bien ahora levántese lentamente, cambies su apoyo de una pierna a la otra y dígame si siente alguna molestia.

- ¿Así?- pregunto Taehyung, más que por confirmación, por decir algo-

- Si muy bien ¿alguna molestia?

- Tal vez un poco, pero no dolor.

- Ok vayamos a la camilla, siéntese por favor.- Taehyung obedeció y se ubico con los pies colgando de una alta cama medica.

- Voy a girar su pie izquierdo y cuando sienta la molestia me dice que pare ¿OK?

- Ok, entiendo- dijo Taehyung, la situación se le había vuelto divertida de alguna forma. Las manos del castaño eran grandes y expertas. Taehyung observo más atentamente y noto que no había anillo de compromiso o casamiento en la mano, así que podría ser soltero, solo faltaba saber si era gay.

- ¿Sientes algo?- pregunto JungKook, mientras el rubio lo miraba con una sonrisa torcida y traviesa en sus labios. No sería la primera vez que algún paciente intentara coquetear, tanto hombres como mujeres solían actuar de esa manera cuando eran tocados, una reacción normal, ante tan atípico acto entre extraños. JungKook decidió mantener la mirada, después de todo el rubio era muy atractivo.

- Ouch, ahí, si, ahí- se quejo el paciente.

- Muy bien Sr. Kim, le sugiero comenzar con el tratamiento lo antes posible y podrá volver a sentirse como nuevo. No es algo complejo pero tiene un trauma muscular que puede volverse crónico. Mi secretaria Susy le dará las recomendaciones y los horarios para comenzar las terapias. – dijo JungKook terminando de examinar al atractivo hombre.

Taehyung asintió y se coloco nuevamente sus zapatos.

- Muy bien Sr. Kim lo veré la próxima semana.

- Llámame Taehyung por favor, y nos veremos entonces la próxima semana- dijo el rubio sin disimular su coqueteo.

- Taehyung, llámame JungKook. Estaré esperándolo.

Tae sonrió una vez más al ser correspondido, y salió con una gran sonrisa hacia la puerta de entrada. El par de hombres de negro al verlo atreves el cuarto sin esperar orden o señal lo siguieron detrás.

JungKook cerró la puerta divertido, mirando la ficha de su próximo paciente.


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