Parte 28

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Perdiendo la razón.

Jimin rodaba de un lado a otro de la habitación mientras pensaba si lo que estaba haciendo era correcto. Obviamente no lo era, pero no podía ante toda su fuerza de voluntad resistirse a JungKook.

El castaño tenía una forma de volverlo completamente dócil.

Presiono una vez más la pantalla de su celular y comprobó la hora. Era pasada la media noche.

Evitar a Yoon Gi no había sido demasiado dificultoso. Con la excusa de que estaba teniendo celos injustificados, se había mostrado molesto y ofendido y eso sirvió para que el hombre no quisiera pasar la noche juntos.

Se fricciono las manos una vez más y las sintió pegajosas por la transpiración. Estaba siendo un tonto poniéndose tan nervioso por eso.

Hablaría con JungKook y aclararía las cosas. El no era ese tipo de personar que engañaba y mentía, el no era del tipo que se convertía en una puta ni bien veía una buena verga como la que tenía el castaño, por era buena y le gustaba su cabeza rosada y su caliente textura haciendo espacio entre sus glúteos...

Jimin se ahogo con su saliva al tiempo que notaba que su pene estaba endureciendo.

El timbre sonó y el rubio dio un salto del susto...JungKook había llegado.

Se seco las manos en sus pantalones y trato de relajarse antes de abrir la puerta.

Tomo el picaporte y la imagen majestuosa del hermoso castaño con sus ojos llenos de lujuria lo golpearon.

JungKook se abalanzo hacia el rubio. Golpeándolo con un beso salvaje al primer contacto.

Cerro de una patada la puerta mientras sostenía el cuerpo delgado del rubio que se escurría entre sus manos.

Chupo, lamio y mordió los hermosos labios de Jimin. Había estado fantaseando con ellos todo el día.

Le arrebato la ropa de forma torpe y desesperada y siguió probando cada parte de su cuerpo como si fuera un delicioso manjar.

Jimin estaba tan ido, tan absorto por el placentero toqué de su lengua que se había convertido en desastre de gemidos.

JungKook en su fantástica travesía a través del pequeño cuerpo, tomo el duro pene de Jimin y lo metió hasta el fondo de su garganta.

Jimin dio un gemido tan erótico que JungKook deseo seguir.

Las succiones profundas iban acompañadas de lánguidos toques de su lengua en los rosados y desprovistos de vellos, testículos.

Jimin retorciéndose sobre el piso de la sala, abochornado y despeinado era la imagen más excitante que JungKook podía pedir.

Acuno su propia masculinidad en su mano y dio una caricia sobre la tela. Abrió su pantalón y saco su caliente extremidad para por fin masturbarse.

Sin dejar de joder el pene del chico con su boca, se sacio a sí mismo con sus manos hasta que ambos estallaron dejando un reguero de semen y saliva por el piso.

El pecho de Jimin subía y bajaba agitado. Todavía no podía conectar dos pensamientos. Miro hacia el castaño mientras todavía daba pequeños besos sobre la cabeza de su pene. La caliente excitación formándose una vez más en su vientre. Una mamada no era suficiente, su ano palpitaba por ser profanado, su cuerpo pedía ser corrompido.

Se acomodo lo mejor que pudo sobre su rodillas y se extendió hacia la boca de JungKook, que sin dudarlo lo recibió complacido de saciar su sed.

Mientras las lenguas jugaban un húmedo juego. Jimin fue tras su objetivo, amasando la semi dura erección de JungKook, para ponerla a punto de cómo a él le gustaba.

JungKook se paro para que el rubio accediera mejor a lo que buscaba y Jimin hundió su rostro en el tupido vello púbico, olía tan masculino que Jimin estaba a punto de perder la razón.

Chupo la punta y metió lo que su boca lo que más permitía, rítJiminmente meciéndose y empujando por más.

Aturdido por el calor placentero JungKook ya nuevamente estaba duro y firme para seguir con la búsqueda de unión.

Levanto a Jimin del piso y de frente a la pared, dejando sus hermosas nalgas a las vistas del castaño.

Abrió su deseoso trofeo y hurgo lo suficiente para tener a Jimin empujando contra la presión.

Se alineo sobre el apretado musculo y se hundió profundo, dejando al rubio temblando y lloriqueando por mas.

Golpeo rítJimin y constante mente el delicioso punto hasta que a Jimin comenzaron a fallarle sus piernas.

Giro al chico y coloco a horcajas de su cintura, apretándolo contra la dura pared. Ahora se veían a la cara, ahora podía ver el instante en el que Jimin se derramaba en placer.

Beso una vez más la deliciosa boca del rubio y golpeado mas dentro de este se derramo, Jimin siguiéndolo en su propio placer arqueo su espalda presionando la aun atrapada verga de JungKook en su interior y se derramo entre el pecho de ambos.

La imagen que recibió el castaño era la cosa más hermosa que jamás había visto, Jimin era un precioso ángel, que entre sus manos se volvía el más hermoso demonio.

MAS ALLA DEL TIEMPO (KOOKMIN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora