MAS ALLA DEL TIEMPO (KOOKMIN)

Parte 23

El diario de JungKooko Jeon Vergara.

JungKook dejo a Jimin sobre el enorme sillón que decoraba el salón.

Jimin seguía sonrojado por el calor y la vergonzosa situación.

JungKook fue directo a la cocina y trajo un poco de hielo envuelto.

Ouch, Ouch- se quejo el delgado rubio cuando JungKook intento colocar el hielo sobre la piel inflamada.

Necesito comprobar que no esté fracturado- dijo el alto antes de posar sus manos en el pie y hacer presión.

Jimin dio un salto y por el dolor y el calor que estaba provocando el castaño.

No es fractura, pero deberíamos ir por una placa. Recogeré nuestras cosas y regresaremos....

Espera, espera.....estoy bien. Veamos la caja, y terminemos con esto, y ya luego podremos irnos.

JungKook asintió y puso sus ojos en la vieja caja de madera corroída. Tenía una pequeña cerradura de bronce.

El castaño la giro y dentro encontró unos cuantos papeles. La mayoría deteriorado por la humedad y el tiempo.

En uno de los papeles se podía observar un boceto de lo que sería un hermoso dibujo.

Casi totalmente mohosa, apreciar la media sonrisa del ángel de sus sueños. Que bien podría ser Jimin.

Mira- dijo sonriendo a Jimin

El rubio dejo caer su mandíbula cuando sus ojos descubrieron el rostro idéntico al suyo. ¿Qué rayos sucedía?

Mientras Jimin seguía perturbado con el dibujo en su mano, JungKook saco de la caja un pesado cuaderno de cuero.

El mismo tenía un símbolo extraño en la tapa, un triangulo con un circulo y una triqueta enlazados.

Estaba bastante conservado ya que el resto de papeles había hecho de cubierta del mismo.

JungKook desato las fibras de cuero que lo ataban y lo abrió.

En una caligrafía pintoresca se escribía: "Diario de JungKooko Jeon Vergara"

20 de septiembre de 1823

Mi nombre es JungKooko Jeon Vergara. Hace una semana llegue a estas tierras. El viaje fue duro y desgastante. En nuestra travesía hemos atravesado la mitad del país en el coche. Hace más de 4 meses que salí de casa y extraño enormemente a mi querida esposa Elena y a mis hijos.

La epidemia de cólera que sufrió nuestra ciudad está arrasando con todos y necesito encontrar un lugar para que podamos vivir

03 de octubre de 1823

He encontrado una casa. Es una hermosa propiedad alejada de todo. La casa está rodeada de un magnifico terreno que podría servir para plantar y criar animales. Elena estará feliz de venir a vivir aquí con los niños.

07 de octubre de 1823

Esta tarde, mis acompañantes de viaje emprenden el regreso, he decidido enviar por Elena para que podamos empezar una nueva vida aquí. Lejos de la terrible enfermedad que está afectando la ciudad.

Extraño mucho a Elena y a los niños. La casa es hermosa y sé que les encantara. He pensado en hacer un parque para los niños.

15 de octubre de 1823

Comencé a contratar la servidumbre. La gente local es muy amable y servicial.

Durante el día me encuentro ocupado trabajando la tierra. Me han enviado a hablar con una anciano que conoce muy bien la tierra, el me dirá que plantar.