Syngnathidae [JJ Project/Bnior]

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11 Octubre, 11:00

Jaebeom se sentía extraño, era el tercer día del funeral de Sooyoung y el dolor volvía a surgir a cada momento que volteaba a ver al fondo del salón donde diferentes arreglos florales lo adornaban y en el centro la foto de su esposa sonriendo como acostumbraba. No se mantuvo por mucho tiempo mirando aquel retrato, era imposible asumir tan rápido su ausencia, así que prefirió inclinarse a los nuevos asistentes quienes imitaban el gesto para avanzar hasta los padres de la difunta, amigos de la familia supuso, ya que durante los dos días anteriores las condolencias fueron entregados por los compañeros de ballet de Sooyoung, amigos de la familia y por supuesto los compañeros de trabajo del mayor, quienes se mantenían a una distancia prudente, acompañando en su dolor a Jaebeom.

Bajando la mirada volvió a inclinarse, pero al momento de volver a la recta posición fue abrazado fuertemente. El característico aroma y cuerpo de su hermano lo estaba sosteniendo y por primera vez en los tortuosos tres días podía sentirse realmente contenido y no pudiendo contener las lágrimas que demostraban el dolor que se albergaba en su interior.

—Aquí estoy —murmuró el hombre cerrando los ojos ante el primer sollozo de dolor que Jaebeom expulsó. Im Hyunsik era el hombre que lo abrazaba con ese cariño que se conservaba a pesar de los años y aunque no mantenían lazos sanguíneos veinte años compartidos los unía mucho más que la sangre.

Se conocieron cuando el padre de Hyunsik ingresaba junto a una mujer que sostenía la mano de un pequeño niño, su sonrisa fue inmediata al fin conocería al pequeño que le entregaría el título de "hyung" y la mujer que llamaría mamá a partir de aquel momento. Su padre le había comentado de ellos, además de las similitudes que tenía con el menor, ambos de cabello negro, pequeños ojos y una sonrisa brillante, era increíble como la familia se desenvolvió rápidamente en la cena, a pesar de ser un poco tímido Jaebeom sonreía al mayor y se acercó para compartir sus juguetes tras la comida. Hyunsik tardó pocos días en tomarle real cariño al pequeño niño, cuidar de él y ayudarlo en lo que necesitara. Jaebeom por su lado temía hablarle abiertamente a su nuevo hyung, era extraño pasar de ser hijo único para tener un hermano, dejar su solitaria vida en su cuarto mientras sus padres discutían, a tener una nueva familia que sonreía y se llenaba de cariño.

El mayor se separó para limpiar su rostro y alejar un poco a Jaebeom del salón, sabía lo duro que era estar tres días completos en un funeral, y aunque no había tenido una perdida como la de su hermano, estar a su lado era fundamental.

—Jaebeomie, sé que es muy pronto, pero ¿Qué quieres hacer?

—Yo —suspiró mirando al cielo, —No quiero volver al apartamento, sé que debería, pero es difícil, quiero alejarme de todo un tiempo.

—¿Quieres ir al extranjero?

—¿Qué estás ofreciendo?

—Bueno, hay un amigo en Japón está comenzando su agencia, y un poco de ayuda no le vendría mal. Me ofreció el cargo, pero si deseas puedes ir tu y yo me hago cargo de nuestra agencia.

Una sonrisa cansada se dibujó en el rostro del menor, —Eres impresionante —se abrazó a su hermano con fuerza, —Nunca dejas de ayudarme y consentirme a pesar de los años.

—Eres mi hermano, no puedo abandonarte —sonrió el mayor acariciando sus cabellos. —además tu harías lo mismo.

Jaebeom asintió con suavidad separándose con una sonrisa. —Realmente no se donde estaría sin ti, eres increíble hyung.

—No sabes cuánto extrañé oírte decir lo genial que soy.

Ambos compartieron una carcajada liviana volviendo al salón, ya poco tiempo quedaba y los restos de Sooyoung se albergarían en un frasco dentro de aquel salón en la iglesia cristiana donde los padres de la mujer decidieron conservar sus restos, una manera más segura y económica para el descanso de ella.

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23 Octubre, 12:23.

El experimento iba de maravillas, comprobando cada día el estado de los embriones, el desarrollo iba perfecto y a pesar estar recibiendo las proteínas necesarias a través de un tubo, todo lucía perfecto. Jinyoung completaba el diario con total prolijidad, prácticamente se llevaba toda su atención hasta que se percató de los días pasados... En pocos días la ecografía del cuarto mes de Sooyoung llegaría, y una mala sensación se apoderó de su estómago.

—Disculpa —sonrió llamando la atención de la chica. —¿Im Sooyung ha reservado la cita de esta semana?

—Deme un segundo Doctor —rápidamente su mirada viajó a la pantalla del computador viendo el horario de las citas agendadas, buscando el nombre mencionando en un par de semanas. —No lo han hecho... Ni está semana, ni la próxima.

«Es extraño», pensó antes de sonreír y agradecer la amabilidad de la mujer volviendo por los pasillos en busca de Lisa, ya que ella fue el contacto para la pareja Im.

—Lisa-ah —sonrió cuando la vio salir de una de las salas.

—Jinyoung oppa —imitó el gesto avanzando hasta la sala de los recién nacidos, para chequear la condición de aquellos bebés —¿Puedo ayudarte en algo?

—¿Sabes algo de Im Sooyoung?, tú les diste el contacto de la clínica, y bueno tiene revisión estos días, pero no ha reservado la cita.

Lisa asintió y sonrió sacando su teléfono de su pantalón. —Le preguntaré a Kunpimook y te entrego la información. —sonrió marcando el número de su amigo.

Habló por unos minutos haciendo finalmente la pregunta importante, sus ojos se abrieron de inmediato y no dudó en lamentar la noticia para despedirse con tristeza yendo hasta el despacho de Jinyoung, abriendo la puerta cuando este le dio el pase y bajó la mirada tras cerrar la puerta.

—Siento que las noticias sean estas, pero Kunpi dijo que Sooyoung había sufrido un accidente hace tres semanas, perdió al bebé y ella murió a los pocos días, Jaebeom oppa incluso salió del país.

Jinyoung asintió con suavidad, lamentó profundamente la noticia, mientras un suspiro salió de sus labios. Se sintió culpable de cierto modo por no informarse antes, y por estar demasiado al pendiente de la investigación.

—¿Puedes conseguir la dirección del cementerio o donde tengan los restos? Me gustaría visitarla.

—Le enviaré un texto a Kunpi, y le entrego la información —murmuró antes de hacer una reverencia. —Por ahora debo volver al trabajo.

Jinyoung asintió dejando a la chica retirarse mientras meditaba sobre la perdida, y esperaba la información. Suspiró nuevamente imaginando como se debió sentir Jaebeom, después de todo, vio la ilusión en sus ojos en las ecografías y la ansiedad por el proceso de fertilización.

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Nuevo cap, me tarde porque me cuesta escribir sobre los funerales D: 
Pero espero que les guste como va la historia, voten y comenten para saber  si es así. y si no, digan para borrar la historia, el perfil y pegarme un tiro(?)
Muchas gracias por leer 💖💖