Cuando nos volvamos a encontrar 🌙 [Caché]

[Capítulo 3] «Besar a una chica»

Pasamos toda la tarde acomodando cosas y aunque los señores de la mudanza nos ayudaron con lo más pesado, igual terminamos agotadas.

Ahora estábamos descansando desmadejadas en la alfombra, muriendonos de risa con las anécdotas de Calle en el Instituto, su adolescencia no había sido nada parecida a la mía.

Me encantaba el hecho de que a pesar el tiempo y la distancia, nuestra confianza y afecto estaban intactos, como si nunca nos hubiéramos separado.

Su teléfono suena y ella se levanta a contestar de un salto mirando la pantalla y sonríe -es mi papá.

Sonrio y aprovecho para levantarme también. No sabía ni que hora era y no había llamado a casa en todo el día.

-Hola pa' -saluda ella efusivamente

Camino hasta el mueble y tomo mi bolso para sacar el celular. Tenía un par de llamadas de Paula, que no había escuchado y una de Vale. Mi papá ya estaría preocupado.

-....a que no adivinas... -me mueve las cejas y me rio -¡Me encontré con Poché!......Si Poché...saluda.

-Holi Germán -grito desde dónde estaba para que me oyera.

Calle se rie y se lleva otra vez el teléfono al oído. -si....si....ajam ahora se lo pregunto. Ok. Te quiero. Bye.

-¿Qué te dijo? -le pregunto divertida.

-Dice que si quieres venir a almorzar con nosotros el fin de semana, cuando venga a visitarme.

-Claro -acepto encantada tomando mis cosas. Debía llamar un taxi -eso sería genial.

-yeiii -celebra dejándose caer en el sillón- ¿Qué haces?

-Será mejor que me vaya -le digo triste- Ya es tarde y no le avisé a mi papá que me demoraria.

-espérame - me pide levantándose de un salto y yendo a la habitación para volver rápidamente con una polera delgada encima de su blusa. lista, vamos.

La miro sorprendida -¿Me llevarás?

-pues claro. No pensabas en irte en taxi ¿O si? -levanta una ceja acusadoramente

-pues si -reconozco encogiéndome de hombros.

Abrió la boca indignada -pues ya ve descartando esa idea señorita, yo te llevo. -me regaña -Además quiero saludar a tu papá y ver a Vale. ¿Nos vamos?

Asiento sonriendo.

El camino a mi casa fue igual de divertido, nunca nos callamos, habían tantas cosas que contarnos que de seguro no terminariamos ni en dos días completos, así que se me ocurrió una idea.

-oye ¿Y si te quedas a dormir hoy en mi casa? -le pregunto esperanzada.

-eso sería genial ¿Pero tu papá querrá?

-obvio. El nunca nos diría que no.- le aseguro sonriente.

-Pero no traje ropa -dijo preocupada.

-no importa. Yo te presto algo, aunque... - la miré indecisa - no sé si tengamos el mismo estilo.

Ella se rie - eso es lo de menos. Me encanta la idea.

Bajamos del auto y le indico la casa. Mi barrio era bastante tranquilo y acogedor. Saco las llaves y entramos.

Todas las luces estaban encendidas, pero no podía ver a mi papá por ningún lado ni a Vale tampoco.

-¡Ya llegué! -grito informando a mi familia- ven, entra.

Mi casa no era precisamente grande pero si muy linda. No habíamos hecho muchos cambios desde que murió mamá, así que debió resultarle bastante familiar a Daniela.