[Capítulo 15] "Ella me gusta"

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Esa noche dormí mejor que nunca. Descubrí que en sus brazos, mi cuerpo se acomodaba a la perfección y de forma inconsciente, encontramos la posición perfecta para las dos.

Jamás imaginé sentir esto que siento, pero es increíble como una sola persona puede cambiar tu mundo en un dos por tres e invadir tus pensamientos de tal manera, que hasta en tus sueños aparezca sin aviso ni notificación.

Eso me pasó anoche con Calle, a pesar de tenerla tan cerquita a mí, mi subconsciente pensó que no era suficiente y se puso muy creativo. Demasiado diría yo, tanto que hasta recordarlo, me ponía de color rojo tomate y me sacó de la cama mucho más temprano que de costumbre.

Esas escenas quedarían prendadas en mi mente por el resto la vida y a pesar de no ser reales, me movían algo tan dentro mío que no estaba segura de si era correcto o no sentirlo en este punto de nuestra relación y aún así, no podía evitarlo.

Ahora estaba en la cocina, con un vaso de agua en las manos y tratando de pensar en cualquier otra cosa. Eran apenas como las 6 de la mañana y todos en la casa debían seguir dormidos, incluyendo a Daniela.

Hoy era lunes y debíamos volver a nuestras rutinas de la universidad y no sabía cómo se iban a dar las cosas a partir de ahora. Ya tengo mis sentimientos claros pero eso no quita que aun mantenga la inseguridad latente en mi. Es obvio que en este momento, nadie debía enterarse de lo que sea que tengamos Daniela y yo pero ¿sería capaz de comportarme como si nada?

Ya de por sí cada que la miraba me sentía como una boba hipnotizada por su belleza ¿mis amigos se darían cuenta?

Que lio.

—¿Poché? —escucho mi nombre y juro por lo bajo. No esperaba encontrarme a nadie a esta hora— ¿que haces despierta tan temprano?— Mi hermana me mira divertida mientras se acerca— ¿No pudiste dormir?

Solo basta escuchar la pregunta y otra vez se me suben los colores al rostro sin poder evitarlo. Me agacho y me encojo de hombros

—Algo así...

Vale me mira entrecerrando los ojos como intentando leer mi mente —mmm...muy raro.

—¿Qué haces tu despierta? —le devuelvo la pregunta tratando de safarme de su inspección.

—Hoy debo ir más temprano  —me informa bostezando— me toca llevar las cosas para un proyecto de ciencia y debo comprarlas antes de ir al colegio. Papá no puede llevarme, así que tendré que ir en metro.

Asiento entendiendo 

—si quieres yo te acompaño —le ofrezco, después de todo no tenia clase hasta las 9 de la mañana y me daba tiempo, además el metro era demasiado peligroso para una niña sola a esta hora.

Me mira sonriendo y acepta. La mando a cambiarse mientras yo preparo algo rápido de desayunar para todos y subo a mi cuarto para arreglarme también, no sin antes acomodar un plato con tostadas y jugo para Calle en la mesa de noche.

Ella sigue dormida, envuelta entre las sábanas, como si hubiera tenido una lucha con ellas y terminaron ganando.

Sonrío de forma inconsciente.

Voy a la ducha y me baño rápidamente antes de elegir mi ropa para hoy y vestirme.

Me acerco con cuidado al lado de Calle y me siento en la cama, debía avisarle que estábamos saliendo para que no se preocupara.

Llevo mis manos a su rostro y acaricio sus mejillas suavemente, ella esboza una ligera sonrisa y el corazón se me acelera como si estuviera corriendo una maratón. Muerdo mis labios y contengo la implorante necesidad de agacharme y besarla.

Cuando nos volvamos a encontrar 🌙 [Caché] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora