María Gabriela por primera vez en su vida sintió lo que era el verdadero temor, al enterarse de que la habían eliminado del grupo dejó caer su celular y con él se fue ella cayendo igualmente en el suelo soltando una cascada de lágrimas y provocando sus gritos.
Minutos después de llantos, convulsiones, arañazos en el piso, Gaby escucha que le llegó un mensaje a su celular, lo toma y se levanta, abre un mensaje que le llegó, un mensaje al privado de "Diablo", era una foto la abrió y corazón se detuvo:
(¿Sabes de quién es esta casa?)
El horror fue tanto que la pobre Gaby azotó su celular contra la pared, un fuerte grito se pudo escuchar provenir de ella cuando escuchó que la puerta principal estaba siendo forzada, Gaby trata de encontrar algún objeto para defender su frágil cuerpo, pero para su desgracia no encontró nada, escuchó que la puerta principal había sido derrumbada, ella puso seguro a la puerta de su cuarto y la de ambas ventanas se encerró en un gran clóset que podía esconderse por completo.
Pasos, ruidos, estruendos, vidrios rotos se podían escuchar por toda la casa y por cada uno era la causa de las lágrimas de Gaby, asomada por clóset pudo ver una sombra de una persona detrás de la puerta de su habitación.
—Querida Gaby, no perdamos el tiempo y sal de una vez —dijo en un tono macabro una voz femenina. —¿No quieres que tu muerte sea rápida?
Gaby se puso sus manos en la boca para callar su agitado respirar y tratar de no llamar la atención.
—Abre la puta puerta si no quieres que esto se ponga peor —dijo esa voz golpeando la puerta bruscamente.
Su corazón bombeaba más y más fuerte mientras escucha los golpes de su puerta.
Se escuchó el lento y tenebroso chirrido, su respiración menguaba más y más cada segundo, los pasos se escuchaban más cerca en la habitación.
Su cuerpo la había traicionado haciéndolo temblar desde la punta de sus pies hasta el más mínimo cabello, podía ver como la chica se paseaba por toda la habitación tratando de encontrarla, buscó debajo de la cama, en el baño, sin lograr hallarla solo le quedaba un último lugar... El condenado clóset.
De lejos se podían escuchar el palpitar provenientes del pecho de Gaby mientras su inevitable muerte se acercaba más ella.
Con solo un tirón la chica misteriosa abre la puerta.
—Te encontré perra —dijo esa chica formando una sonrisa maliciosa en su rostro y agachándose para poder estar al nivel de Gaby, ya que esta se encontraba en posición fetal en el suelo del clóset. —Pudimos hacerlo por las buenas —la tomó por el cabello. —Pero escogiste hacerlo por las malas —con un halón logra sacarla del clóset por el cabello.
—¿Pero tú no eras una de las víctimas de Diablo? —preguntó Gaby al ver mejor el rostro de su asesina.
—Prefiero ayudante bien pagada —respondió ella estando a un lado del indefenso cuerpo de Gaby.
—Espero te traicione y te mate por perra —musitó Gaby.
—¡Maldita! —estaba la pobre Gaby tirada en el suelo llorando mientras recibía patadas en su vientre. —¡Muere Gaby, muere!
La chica aprovecha que ella está indefensa sin fuerzas ni para mover un dedo y se le monta encima.
—Pobre tan linda que eras —dijo colocando sus labios sobre los de Gaby e introduciendo su lengua. —Pero cuando acabe contigo, de linda no tendrás nada —clavó un cuchillo en su pecho.
Y sacó para introducirlo nuevamente una y otra vez cada vez más fuerte para luego enterrarlo en su delicado rostro.
Se levanta de su cuerpo y como es el procedimiento saca su celular para tomarle una foto.
—AXL [S. S.]
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Diablo En Línea II © [S.S.]
HorrorEres agregado a un grupo de amigos donde conoces a todos ¿Que podría salir mal?, absoluta mente todo. Pero ahora las reglas cambian, ahora eres agregado en un grupo donde no conoces a nadie y nadie te conoce. ¿En quien podrás confiar?