Día 8 (15:50 PM)

33 1 0
                                        

(Airi's PV)

Entré por la puerta de mi nuevo apartamento, justo en la puerta frente a la de Mili. Sé que no quieren que esté sola pero yo necesito un momento de soledad en mi propia casa. Miro mi alrededor viendo la distribución que ahora habían tomado los muebles. Las cajas aún amontonadas con algunas cosas sin colocar. Este lugar era un poco más pequeño que mi apartamento de antes, pero tenía que acostumbrarme a ello.

Camino hacia la que es ahora mi habitación, en busca de ropa para cambiarme. Entro en mi ahora habitación, encontrando mi ropa aún metida en maletas y cajas. Mis libros en la cajas y todas las estanterías que había por el piso estaban vacías. Sé que les dije que tardaría como mucho diez minutos, pero necesitaba ordenar mi nuevo hogar para sentirme realmente en casa. Empecé a colocar primero las cosas que correspondían a mi cuarto dejando los miles de libros que tenía para el final, junto con mis figuras. Empecé a colocar los cacharros de la cocina, los marcos con las fotos, mis macetas con algunas flores, figuras de seres mitológicos, los productos de aseo, el maquillaje, mis zapatos, mi ropa y los cojines. Miré el reloj que había colocado en la mesilla dándome cuenta que eran casi las cuatro y cuarto de la tarde. Llevaba veinticinco minutos en casa colocando las cosas y aún me quedaban las cajas con los libros por colocar. Me puse a colocar lo último que me quedaba en las estanterías repartidas por cada habitación.

-Ahora viene mi pequeña sesión de relajación y de belleza.-me digo en voz alta, desabrochando mi vestido.

Entro en el baño quitándome la ropa en el proceso, enciendo el la ducha y me dirijo al armario que hay debajo del lavabo sacando todo lo necesario para arreglarme. Entro en la ducha, me lavo el pelo y me echo mi gel de olor a moras con lavanda. Me siento en el suelo una vez se quita toda la espuma de mi cuerpo, dejando que la cascada de agua caliente moje mi cuerpo entero. Cierro los ojos apoyando mi cabeza en las baldosas de la pared, suelto un suspiro dejando que mis músculos enteros se relajen, hasta el punto que me quedo dormida dejando que la lluvia caiga en mi cuerpo.

(Alerta Lemon, a partir de aquí la lectura es su responsabilidad, no mía)

Me despierto por el sonido de unos fuertes golpes en la puerta de entrada de mi casa. Como puedo, me levanto cerrando el agua que ya salía completamente fría, cojo una toalla que esta cerca y la envuelvo a mi cuerpo cubriendo solo lo justo. Mis grandes pechos se encontraban apretados dejándose ver un poco de mi canalillo por encima de la toalla y parte de las cachas de mi trasero se veía por debajo. Camino meneando mi pelo para quitarle un poco de humedad.

-Me cago en todo. Me quedé dormida, Mili va a matarme lenta y dolorosamente.-protesté corriendo como podía hasta la puerta.

Abro rápidamente sin mirar por la mirilla quién esta del otro lado de la puerta. En cuanto la madera esta un poco entre abierta siento un empujón que me hace alejarme algo asustada por la premura. Camino de espaldas en la penumbra del pasillo sin conseguir ver bien a las dos sombras que han entrado por la puerta de mi casa y que ahora caminan hacia mí. Llego al salón chocando contra el sofá subiendo un poco mis cachas al respaldo de este.

-¿Preparada para dejar que te amemos, cariño?-preguntó Zen, acercándose lentamente hacia donde me encontraba, dejándome ver el fuego que ardía en sus ojos.

-No debes temer, princesa, nosotros vamos a hacerte olvidar todo aquello que tortura tu mente, vamos a hacerte disfrutar para que solo recuerdes nuestras manos en tu piel.-aseguró V rodeando el sofá y mirándome con sus ojos turquesa totalmente oscurecidos por el deseo que se reflejaba en ellos.

Una especie de descarga recorrió mi cuerpo al sentir los dedos de Zen acariciando mis labios íntimos. Un profundo gemido salió de mis labios en cuanto V rodeo mi cuerpo con sus brazos y acarició mis tetas con sus enormes manos por encima de la tela.

Mystic LoversDonde viven las historias. Descúbrelo ahora