Se me paso muy rápido el mes, puede que el estar con Alex y Silvia haya sido bueno. Mañana me voy a casa...
Me levante lista para empezar mi ultimo día en la ciudad. Me sente en mi cama y me estire, luego mire mi armario y me acerque para vestirme.
Me di una ducha rápida y luego me vestí con una camiseta negra y unos vaqueros azules claro, me puse mis típicas zapatillas rojas y fui al baño para peinarme. Delante del espejo me hice una trenza simple.
Me mire a los ojos en el espejo y luego mire las lentillas, decidí que por hoy no me pondre lentillas. ¿Para que seguir ocultándome?
Baje tranquila al salon y empece a desayunar unas tortitas con miel. Comía tranquila mientras bebía un vaso de batido de chocolate hasta que la puerta sono. Lo primero que vino a mi mente fue algunos de los hermanos...
Me lave con una servilleta la boca y fui a abrir la puerta, me encontre con la pequeña de pelo rojo con sus ojos cristalizados. Me agache para mirarla y ella rápidamente me abrazo, sorprendida correspondí.
-¿Mañana te vas?- me pregunto triste separándose de mi, ladee enternecida la cabeza y le seque las lagrimas que caían poco a poco.
-Si Silvia, mañana me voy...- le dije y vi como empezaba a llorar un poco más.
-T-Tus ojos... volvieron a la normalidad...- dijo mirando a mis ojos, le sonreí.
-Si, ¿te gustan?- Silvia asintió con la cabeza, reí levemente -¿Donde esta tu hermano?- volví a preguntar.
-Ya viene...- me dijo aun un poco triste.
-Hola...- escuche a Alex, levante mi mirada encontrándome con la suya. Alex abrió mucho los ojos y sonrió.
-Lindos ojos- sonríe y yo solo me pongo un poco roja.
-Gracias Alex- vuelvo a mirar a Silvia.
Me levante y les mire a los dos.
-¿Quieren pasar? Estaba desayunando- sonreí un poco apartándome de la puerta.
-¿No seremos molestia?- pregunto agarrando de la mano a Silvia, le pequeña ya entraba emocionada a la casa.
-Claro que no hermanito... sino no nos habría dicho- dijo la niña inflando sus mejillas, Alex me miro y yo asentí con la cabeza.
Los dos entraron a casa y les invite a sentarse.
-¿Habéis desayunado?- pregunte a los hermanos. Silvia negó con la cabeza pero Alex asintió.
-Vale... ¿no quieres nada Alex?- insistí mirándole.
-No hace falta...- fue interrumpido por su estomago, le mire burlona.
-¿Seguro que desayunaste?- pregunte burlona y él desvió la mirada levemente rojo.
-Maldito estomago traidor...- murmuro haciéndome reír.
Sali del comedor para ir a la cocina y cocinar rápido dos tortitas con miel. Llegue al comedor y lo puse delante de Silvia y Alex.
-No hacia falta _____- dijo Alex apenado.
-Tu estomago no decía lo mismo... ¿queréis algo para beber?- les mire, los dos hermanos intercambiaron una mirada.
-Batido de chocolate- dijeron a la vez.
-Vale- sonríe y volví a la cocina, servi batido de chocolate en dos vasos y se lo di a los hermanos.
Me sente en mi sitio para continuar mi desayuno pero esta vez con compañía, comíamos en silencio hasta que Alex lo rompió.
-¿Es verdad que mañana te vas?- me pregunto Alex, levante mi mirada para mirarle. Ocultaba su mirada mirando el desayuno.
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Falsa tranquilidad //Nightmare sans x tu Undertale//Pausada
Fiksi Penggemar"La verdadera maldad esta bajo una amistosa mascara" Esta frase estuvo siempre en el aire de Dreamtale, donde vivían dos hermanos esqueletos cuidando el árbol de los sentimientos, Dream y Nightmare. Dream protegía los sentimientos positivos y Nightm...