DISPATCH [Jenlisa]

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-¿Por qué tiene que hacer eso? Estábamos realmente pasando un lindo momento y de repente me dice que me extraña. Es lógico, sé que me extraña, yo también la extraño, pero no sé de qué manera explicárselo, y duele, duele que no lo entienda, duele que me haga ver como la mala siendo que sólo intento protegerla. Es que no puedo no protegerla, es una bebé y necesita esto, me necesita a mí, no a un viejo hediondo que no la trate bien, ni a un morocho sensual, merece a una chica linda y delicada que sepa hacerla sentir bien y que su lugar seguro sea entre sus flacos y largos brazos y no en un sitio oscuro... No, Lalisa, concentrate. Vas a superarla, ella también te superará, podrán estar juntas, como amigas. Se presentarán a sus futuras parejas como mejores amigas, o tal vez sólo amigas, o hasta puede ser que solamente como compañeras de trabajo. No debe ser muy difícil superar a tu primer amor, ¿cierto? Ni aunque haya sido tu pareja por años, seguramente se me olvide pronto, no es como si tu primera vez nunca se olvidara, ¿cierto? Estoy cien por ciento segura de que lo superaré y esto no será más que un simple recuerdo que contaremos a nuestros hijos. ¿Hijos? ¿superar? ¿Qué es ese cuento de hadas? Esto no pasará nunca.- Lisa le hablaba a su reflejo en espejo indignada.- No puede ser.- Se sentó en el piso con su espalda apoyada en la cama y se abrazó a sus rodillas.

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-Solo salió corriendo. No sé qué hacer Jisoo, habla con ella.- Jisoo la vio a los ojos unos segundos y rió.

-¿Jennie Kim pidiéndome que hable por ella?, por favor nini, dejalo así, pueden estar bien, lo han demostrado, solo que tu la cagaste. Pero ella lo intentó, se ve que quiere volver a ser cercana. Se necesitan Jennie, pero no solo sexualmente hablando, se quieren, intenta dejar ciertos temas de lado por ahora. Tal vez en un tiempo puedan volver a abrazarse y decirse frases ridículas. Pero no la presiones, Jen.

-¿Crees que acabará en algún momento? Digo, cuando todo se puso como siempre lo soñé, tiene que pasar todo esto...

-No puedo prometer nada, pero ten esperanza.- Cuando Jisoo estiró su mano hacia la de Jennie para acariciarla de manera tranquilizadora, el sonido del celular de la mayor las sorprende.- Dame un minuto nini.

Salió casi corriendo al ver quién era el culpable de la interrupción de la charla. Segundos después Jennie salió de la cocina hacia la sala donde se encontraba Roseanne con su guitarra.

-Hey, ¿y Jisoo?

-Recibió una llamada y salió. ¿ustedes dos lograron hablar?

-¿Quién la llamó? Y no, no hemos hablado.

-Ni idea.- en ese momento voltearon a sentir pasos apresurados en la escalera, encontrando a Jisoo corriendo hacia arriba.

La mayor se dirigía a la habitación de la maknae, ya que tenía cosas que decirle. Si bien Jiyong estaba moviendo sus cartas, La coreana sabía que no podía ser explícita con ella por ahora.

-Lisa, abreme la puerta

-No hablaré de Jennie.

-Ábrela a ahora por favor.- Se escuchó un golpe seco dentro de la habitación, y segundos después la puerta se abrió.

-¿Pasó algo?.

-Eso te pregunto, ¿qué fue eso?

-Me caí de la cama, Jisoo, sé que lo sabías.

-Es que siempre lo haces.- Rió la mayor mientras ingresaba a la habitación y tomaba asiento sin permiso sobre la desordenada cama de la tailandesa.- Escucha, tengo noticias. Pero antes de esto, quiero que me prometas no te adelantaras a nada, ¿si?

-Ve al grano, ¿si?

-Ahora que lo mencionas, deberías hacer algo con ese de ahí.- Señaló el cuello de la tailandesa.

-¡Jisoo!

-Bien, lo siento. GD descubrió algo, algo realmente fuerte, y le dijo a Hyunsuk que ya las dejara en paz o lo iba a sacar a la luz, así que Hyunsuk no tuvo más remedio que estar de acuerdo.

-Eso significa que..-

- Que te llamará en unos minutos, y depende de lo que suceda verás si pueden volver a estar juntas.

-Sí, no creo que eso pase.- El celular de Lisa comenzó a sonar.

-Espera, piensalo, ¿sí?

-Hola.

-Lalisa, hola, ¿puedes venir a la agencia?

-¿Con quién?

-Realmente necesito que vengas sola.

-Bien. Iré en unos minutos.- colgó.

-¿Con quién irás? Iré contigo.

-Iré con Rosie, quédate con Jen. ¿si?

-Está bien. -dijo no muy convencida.- la cuidarás ¿cierto?

-Claro, vete, me vestiré.

Ya lista, Lisa se metió sigilosamente a la habitación de Roseanne para comprobar que ella continuaba en su siesta, luego de esto, se dirigía a la agencia.
En el camino, Lisa ya no sabía qué esperar de esta reunión, el jefe había hablado en un tono neutro, que no dejaba más que dudas en la mente de la tailandesa.

-Pase señorita Manoban, el jefe la espera.- sonrió la secretaria de Hyunsuk.

Lisa le devolvió la sonrisa y se adentró en el pasillo que llevaba a la oficina de Yang. Llegó frente a la puerta y se detuvo unos cuantos segundos a tomar aire. Cuando logró tranquilizarse, golpeó la puerta y al instante se escuchó murmurar "pasa" de el otro lado de la puerta.

-Hola, te esperaba, Lisa.

-Lo sé, ¿qué necesita?.- Hyunsuk se puso de pie y rodeó el escritorio con la mirada fija en los ojos de Lisa, como suele hacerlo.

-Así que ¿hablaste con tu amiguito Jiyong?- dijo cuando se paró frente a la chica.

-No he hablado con él en un tiempo, ¿por qué?

-Mi dulce maknae estrella, ¿crees que soy idiota? Si lo fuera no las habría elegido a ustedes, ¿no crees?

-De verdad no lo he hecho, y si lo hubiera heco, ¿cuál sería el problema? Acaso ya tampoco puedo temer amigos?

-Entonces si no fuiste tú, tal vez alguna de tus amiguitas sepan quién fue.- Volteó a su escritorio y presionó el botón del intercomunicador.- Llama a Jennie, dile que venga urgente.- dejó de presionar el aparato.- Será la primera a la que le preguntaré. Y si no responde...-

-Bien, yo fui quién hablo con GD, ¿qué sucede?

-Es lo que quería escuchar.- volvió a acercarse a Lisa, y pasó una mano por detrás de su cuello, enredando suavemente un poco de su cabello entre sus dedos.- ¿Crees que puedes jugar conmigo?- tiró firmemente el pelo de la chica hacia abajo, para tener mejor acceso visual a sus ojos enrrojecidos.- ¿De verdad te creíste alguien capaz de amenazarme? ¿qué podrías contra mi?- susurró cerca de su oído.

Hyunsuk giró sobre si mismo sin dejar de sostener firmemente a Lisa, y la empujó hacia atras, haciendo que su trasero choque contra el ordenado escritorio. El cuerpo del hombre se abalanzó al de la chica, apoyando todo su frente contra el de Lisa. El aliento caliente de Yang golpeaba y resonaba en el oído de la  tailandesa, mientras su mano libre paseaba con desespero sobre la espalda de la menor, quien forcejeaba inútilmente, sólo logrando que los agarre se intensifiquen y que el cuerpo del hombre se pegue más al de ella.
Los dientes de Yang se clavaron en su oreja y lo siguiente que escuchó fue un susurro entonando un lamento.

-Lo lograste.