Mi guardespaldas

Capítulo 19.

Despierto abrazada a él. Se siente tan bien estar asi.
Me alegra que todo se este empezando arreglar. Ya los dos sabemos lo que sentimos, nos hemos dicho poco hasta ahora, pero es suficiente para saber que ambos queremos estar juntos otra vez y que en esta ocasión nada ni nadie nos va separar. Al menos de mi parte dare lo mejor de mi para que esto funcione. Nos separamos durante cinco años, pero el destino o no se que nos volvió a juntar, asi que hay que respetar las decisiones de la vida.

Me levanto del sofá, porque aqui nos quedamos dormidos después de terminar de ver la película. Me duele el cuello y se que William también despertará con molestias corporales despues de soportar mi peso toda la noche. Le preparare el desayuno para consentirlo por lo que hizo conmigo, me siento tan feliz..... ¡Estamos juntos!!!.... Aun no me lo creo, pero es la realidad. Me siento un poquito nerviosa en cuanto al tema del sexo. No niego que no lo deseo, pero el quiere ir despacio y yo respetare eso, aunque nuestros cuerpos quieran hacer combustión cuando estan en mutuo contacto, es mejor esperar el mejor momento. En cuanto a lo demas no se como quedamos, novios o amigos con derechos, estoy confundida, pero lo hablaremos poco a poco.

Hago el desayuno para ambos. Lo dejo en la mesa y me voy a mi habitación a bañarme y ponerme algo decente.
Me decido por unos jeans rotos azul marino y una blusa beige, junto a unas ballerinas. Solo me maquillo un poco mis pestañas y me pongo labial cor durazno.
Bajo las escaleras y Will ya esta también cambiado y bañado.

Nos damos los buenos dias y me vuelve a besar con la misma pasion de ayer. Pero antes de que termine quitandole la ropa me detengo y nos sentamos a desayunar. Todo quedo rico. Despues de todo las clases de cocina de Amalia no han sido en vano.
William me mira con esa mirada que parece que intenta leer todos mis pensamientos. Me siento nerviosa, ya no es la misma mirada de hace 5 años, ahora es mas directa y tiene un matiz diferente. Espero no sea nada malo.
Me aclaro la garganta para poder decir algo y asi terminar con este duelo de mirarnos uno al otro.

-¿Que quieres hacer hoy Will?.-

Me mira y sonrie. Algo planea.

- Mmm.... No se...¿Que te parece una vuelta por Central Park? Asi podemos sacar a los chicos a pasear. -

Con los "chicos" se refiere a los perros.

- Claro.... Me encantaría. Vamos entonces. -

Salimos en mi auto y llegamos al parque. Hoy es Domingo y tal parece que mucha gente decidió pasear hoy. Hay demasiada. Pero no nos importa, les colocamos sus collares a los perros y caminamos un rato.
Despues de un ratito los soltamos para que corran un poco y hagan sus necesidades.
Will me toma de la mano. Ambos hemos platicado mucho de temas triviales. Como hemos cambiado nuestra imagen y nuestra vida, le he preguntado por su familia y dice que siguen viviendo en el pueblo de donde somos. Nadie se ha querido mudar. El les ha ayudado a mantenerse todo este tiempo que ha trabajado pero que a veces los extraña mucho.

Lo entiendo. Yo también extraño a mi familia. Sobre todo a mi padre. Decido abrir mis sentimientos sobre eso y le cuento lo mal que me llevo con mi madre y mis hermanos. El no se sorprende, dice que siempre tuvo la impresión que mi madre era capaz de tratar a cualquiera de sus hijos como un negocio. Al final no se le cumplio totalmente pero yo heredé una fortuna que de alguna manera también le beneficia a ella.
Me quedo sorprendida por sus palabras, nunca pensé que el tuviera en ese concepto a mi madre. Si era asi, ¿porque no me lo dijo?.
En fin,supongo que eso es pasado y tenemos que aferrarnos al presente.