Capítulo 32.

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La sesión de estar unidos cuerpo con cuerpo es interminable hasta ya bien entrada la noche. De verdad que William es un hombre insaciable en la cama. Por varios segundos se instala en mi pecho la sensación de celos por no saber que fue de su vida sexual en estos cinco años. Pero ya lo pasado es pasado, ahora el y yo estamos comenzando de nuevo y supongo que eso es lo que importa. Al menos para mi.

Nos levantamos los dos super hambrientos y después de darle a Maya su medicina para la recuperación de su herida, nos tiramos de nuevo en la cama y nos dormimos abrazados.

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A la mañana siguiente el sonido de mi celular me despierta por que hace un ruido infernal al vibrar sobre la mesita de noche. ¿Quien osa despertarme tan temprano?.... Si es Isabel, juro que corre el riesgo de ser despedida.
Miro con los ojos entrecerrados la pantalla de mi teléfono, pero como estoy toda modorra no logro ver bien el nombre que aparece en la pantalla, asi que sin saber quien es contesto.

-Alina Smith, ¿quien habla?. -

-¡¿QUIEN DEMONIOS TE CREES PARA CORRER A TUS HERMANOS DE TU CASA?!. - la voz de mi madre inmediatamente me quita toda la modorrez y me siento en la cama de un salto.... Rayos... Estoy en problemas... Pero tomo una gran bocanada de aire antes de contestar.

-Mamá, tranquilizate....., no los corrí, solo les dije que si no se podian portar con modales educados, ya sabian donde estaba la puerta..... - William abre los ojos y con expresión confundida me ve. Articulo con mis labios y le digo que es mi mamá mientras le señalo el teléfono. El solo asiente y se pone de pie para entrar al cuarto de baño... Me quedo por varios segundos embobada viendo su cuerpo desnudo e incluso olvido que estoy en plena llamada con la mujer que es mi madre.

-¿Crees que un par de criados son más importantes que tu propia familia.? - otra vez su voz y sus palabras me hacen reaccionar y solo cierro los ojos frustada ante lo que ha dicho.

-Ya te lo dije que ellos no son solo simples criados. Amalia es una gran amiga que me ha apoyado desde que llegué aquí y bueno...., William ya sabes lo que es y esta vez no dejare que tus opiniones intervengan. -

-Mira Alina. Solo te lo voy a decir una vez y espero te lo grabes muy bien en tu cabecita...., aléjate de William Carter o te vas arrepentir de haberme desobedecido. -

-¿Por que madre?. ¡SOLO DIME POR QUE LO ODIAS TANTO!.... -

-No lo odio......lo aborrezco que no es igual. Un muerto de hambre como él no merece formar parte de nuestra familia. Y te lo vuelvo a repetir..... ¡Alejate de él...! - y sin decir más cuelga el teléfono. Yo resoplo porque realmente no la entiendo. No se en que le afecta que William y yo estemos juntos. Creo que ya tengo suficiente edad como para decidir con quien quiero estar por el resto de mi vida.

Con lágrimas que intento retener en mis ojos para que no salgan,me pongo de pie y me dirijo al cuarto de baño para darme una ducha. Ahi sin poder evitarlo las lágrimas salen y por instinto cierro la llave del agua fría y solo dejo la de la caliente, la cual no tarda en intensificarse y un vapor comienza a cubrir todo el cuarto. Siento que mi espalda arde, pero no importa, solo quiero por un momento dejar de sentir y dejar de pensar. La piel siento que se quema poco a poco y justo cuando voy a dejarme caer en el piso y esperar a que toda el agua caiga sobre mi, unas manos fuertes me sostienen de los brazos y me sacan del baño cargada. Siento al instante quien es,ese perfume puedo reconocerlo a metros de distancia. Su camisa siento que se ha mojado pero no me importa, solo me abrazo a él y cuando me deja en la cama lo atraigo hacia mi mientras le doy un beso en los labios.

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